Una mujer australiana perdió los dedos de su pie derecho tras someterse a una terapia de pedicura en una pecera mientra vacacionaba.
La víctima, de nombre Victoria, ya había perdido la mitad del dedo pulgar cuando al cortarse con un vidrio se le infectó el hueso y le realizaron la amputación.
«En el 2010 durante un viaje a Tailandia la mujer se sometió a una pedicura con peces y una bacteria se le infiltró por la cicatriz del pulgar hasta la médula».
Al presentar los síntomas acudió al médico y un año después le diagnosticaron schwelmenella, una infección que come los huesos y en el 2012 le amputaron el dedo.
Sin embargo, debido a la presión realizada sobre el pie por caminar sin un dedo, le casó úlceras y otra infección en el pie y le amputaron otro dedo.
Dos años después, médicos le amputaron a Victoria dos dedos más y en 2017, le cortaron el meñique.
Con Información de: El Debate
