diciembre 11, 2024
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septiembre 16, 2018 | 581 vistas

Shalma Castillo.-

Cd. Victoria, Tam.- Recorrer todo un país para brindar ayuda humanitaria y estar a cargo de más de 20 proyectos, todavía se da el tiempo para entrenar deportes olímpicos.

Aunque extraña la comida de Ciudad Victoria, sobre todo, las flautas, la carne asada y los trolelotes, Cassandra Chaire Hernández se ha tenido que adaptar a diferentes culturas en el mundo.

A sus 30 años de edad, lleva ya un amplio curriculum internacional.

Luego de concluir los estudios hasta nivel media superior en el Colegio Surval de esta Capital, continúa su carrera en la Universidad de Texas en Austin, en Relaciones Internacionales.

Posteriormente, al hacer un trabajo voluntario por cinco meses en Brasil, le interesa seguir preparándose en esa rama, y opta por la Maestría en Cooperación y Desarrollo International, en la Universidad de Pittsburg – Graduate School of Public and International Affairs (GSPIA).

Una vez siendo master en la profesión, trabaja por tres años cinco meses en Washington D.C.

Ya ahora, lleva casi dos años viviendo en Addis Abeba, Etiopía. Trabaja para una ONG humanitaria, ‘The International Rescue Committee (IRC)’.

 

UN POCO, SOBRE LO MUCHO DE ETIOPÍA

Cassandra comparte que Etiopía es un país sumamente interesante y con una historia diferente a cualquier otro país del mundo…

“Es especial porque no ha sido colonizado, los italianos ocuparon Etiopía por cinco años, pero sin colonizarlo, tienen su propio calendario, lenguaje, es diferente a todo África, aquí el 70 por ciento son cristianos, el resto musulmanes porque viene la influencia árabe de Somalia, hay muchos grupos étnicos”.

La cultura, es muy diferente, son muy orgullosos de sus raíces porque nunca han sido conquistados, y ser del grupo étnico al que pertenecen, aunque eso tiene sus complicaciones porque es difícil de gobernar un país que está tan separado ideológicamente.

“En México había aztecas, toltecas, mayas hace añales, pero todos somos mexicanos y nos ponemos la verde, en Etiopía, es diferente gobernar, porque dicen soy oromía, soy tigray y hay conflictos étnicos entre ellos”…

 

ENTRE MÉXICO Y ETIOPÍA, NO HAY COMPARACIÓN

“Simplemente hay comparación con México”…

En Etiopía hay mucha pobreza, es uno de los países más pobres que se encuentra en el número 168 a nivel mundial, hace falta mucha infraestructura, la población es de nivel educativo bastante bajo.

Aunque Addis Abeba, la capital, es mucho más desarrollado del país, el resto es bastante rural y su fondo económico es microagricultura.

Aunque creciendo la parte social, pero la mayoría de la gente vive de forma muy humilde.

“Eso que se ve en redes que la gente se está muriendo de hambre, no es así de extremamente, solo cuando hay emergencias como en los últimos dos años al país le pegó la sequía y cuando hay sequía, el país pide ayuda para que otros países puedan proveer suficiente comida, y como quiera recibe bastante ayuda de la ONU y otras organizaciones, y para eso estamos nosotros acá”.

 

LOS PROYECTOS QUE TRABAJA

Los proyectos que desarrolla Cassandra, son alrededor de todo el país, principalmente en materia de agua y saneamiento.

Se ofrece ayuda de emergencia y asistencia a largo plazo a refugiados y desplazados por la guerra, la persecución o un desastre natural.

“Esta organización es una de las que se encarga y asegura que los campos de refugio (que hay muchísimos aquí), tengan agua y que sea agua al estándar mundial y de la ONU, que reciban 20 litros por persona al día, que esté tratada y potable”.

Ella es la coordinadora de todos los proyectos que tienen que ver con refugiados en Etiopía, y maneja alrededor de 20 en el país.

Aparte, dan entrenamiento de saneamiento en los campos, también constituyen baños/letrinas, enseñan sobre la cultura del lavado de manos, cómo usar el baño.

Así como programas de educación para niños y la construcción de escuelas, programas de protección que han sufrido trauma, servicios para mujeres que han sido violadas o asaltadas.

 

UN GRAN EQUIPO

IRC cuenta con un equipo de trabajo de mil personas en Etiopía, en Addis son alrededor de como 80 integrantes.

En el equipo de Cassandra, son 12, pero particularmente con ella trabajan dos personas, que ven específicamente el tema de refugiados.

“Si un donador, quiere aportar dinero para ejecutar un proyecto de educación o agua en tal región para siete campos de refugio, yo trabajo con el equipo técnico para diseñar el proyecto, entregamos la propuesta, nos dan el dinero y luego ejecutamos el proyecto”.

Cassandra trabaja alrededor de 20 proyectos en su portafolio de refugiados, los cuales tienen un recurso de aproximadamente 30 millones de dólares al año, que se destinan para servicios de agua, educación, salud, protección de niños y mujeres.

Desde que estudia la preparatoria, Cassandra se da cuenta que ella quiere dedicarse a estas causas.

“Esto te ayuda a ser mejor persona y crecer profesionalmente, aparte tienes oportunidad de viajar mucho, conocer más del mundo y las diferentes culturas con un aspecto antropológico o de desarrollo internacional sustentable, y lo natural para una persona en este ambiente, es conseguir experiencia en países donde más lo necesitan”.

 

PLANES Y EXPERIENCIAS

Cassandra dice que quiere continuar en esa región por lo menos dos años más y después hacer otro plan, para analizar si sigue por más tiempo o se regresa a Estados Unidos.

De todos los lugares donde ha vivido, el más difícil es Pittsburgh, Pensilvania, porque hace muchísimo frío y nieva demasiado, en Addis el clima es fresco, no hace tanto calor.

También, dice que donde está, muy pocas personas conocen a mexicanos, “me pasa muy seguido que dicen que soy la primera mexicana que conocen, no hay mexicanos aquí aparte del embajador, y hay muy pocos latinos, si conozco uno ya somos mejores amigos en el instante”.

Las reuniones familiares, hasta parecen de la ONU, pues un hermano vive en Austin, una en Alemania, otra hermana y sus padres en México.

“Casi siempre tratamos de reunirnos en Navidad, vamos a casa, ya sea en Victoria, o la Ciudad de México, pero por lo menos nos vemos una vez al año”.

Comparte que en junio se les presenta la oportunidad de poder coincidir todos, muy raro que no sea diciembre, pero esta vez en Carolina del Norte.

“Alondra, mi hermana, estaba haciendo un intercambio y yo una carrera del triatlón, todos fueron a verme y aparte aprovechamos para ver la universidad de Alondra, fue padre y aparte nadie conocía Carolina del Norte“.

 

APASIONADA DEL DEPORTE

Entre las numerosas actividades que realiza Cassandra, está el practicar deporte para triatlones.

De hecho, recientemente logra completar un Half Ironman (1.9 km de natación, 90 km de ciclismo y 21.1 km de atletismo).

Platica que para prepararse para una carrera de ese tipo, se prepara desde cinco meses antes, y entrena durante seis veces a la semana, a veces siete u ocho.

Toda una odisea… “bastante difícil prepararme porque aquí estás corriendo a lado de borregos, becerros, vacas, personas caminando, buses, carros, es un caos”…

Desde las seis de la mañana, entrena corriendo para evitar tráfico y el humo de la ciudad… los fines de semana solo hace bici y la nadada en un hotel.

También practica en el gimnasio, en su casa en bici adentro y luego afuera, toda una rutina tenía por planear.

Sin embargo, expresa que la carrera la disfruta, pero las condiciones de entrenamiento son difícil.

Una anécdota, en torno al ámbito deportivo, es formar parte de un comercial con una atleta olímpica.

“Unos amigos trabajan en una compañía de marketing, y cuando hago mi Iroman me dice que yo soy ideal para un comercial, me comentan sobre un comercial con una atleta olímpica que ganó medalla de oro en Río de Janeiro y rompió récord de los diez mil metros, y ahora salgo en el comercial nacional corriendo con ella”.

 

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