José del Carmen Perales Rodríguez.-
Cd. Victoria, Tam.- La inminente negativa por parte el Gobierno de Estados Unidos de dejar ingresar a quienes integran la caravana migrante, plantea un escenario preocupante para los municipios fronterizos, pues al establecerse generarán una presión social mayor a la que ya prevalece, aseguró Jorge Pensado Robles.
El ex dirigente empresarial añadió que ante esa posibilidad lo mejor que pueden hacer gobierno y sociedad es prepararse, pues por el momento no existe ninguna posibilidad de que sea contenida esta marcha integrada por centroamericanos.
“Muy probablemente no pasarán por esta Ciudad, pero sí lo harán por la costa; sin embargo, en ciudades fronterizas seguramente se quedarán, porque no vemos ninguna posibilidad de que el gobierno norteamericano los vaya a dejar pasar a quienes no tengan documentos”, advirtió.
Pensado Robles dijo que no han hecho ningún posicionamiento como sector, pues se trata de algo que los tiene a todos un poco sorprendidos, porque nunca se había visto un contingente de esa naturaleza y tan organizado.
“Pero es indudable que al quedarse en Tamaulipas la mayor parte de estas personas nos va a generar una fuerte presión social, independientemente de la que ya traemos por propia inercia”, adelantó.
En este sentido, el empresario no descartó que haya alguien que está movilizando a esas personas que en unos días más llegarán al estado, por lo que habría que irse preparando para ver cómo se va a enfrentar la situación, porque esas personas se quedarán en el estado y hay que darles los satisfactores mínimos que garanticen su vida y su seguridad.
“Sin lugar a dudas a todos nos mueve el corazón y el alma esta situación por la que están atravesando todos los que vienen caminando, pero al final del día tampoco tenemos espacio para todo mundo”.
Finalmente, Pensado Robles comentó que es un problema “que a todos nos debe preocupar y ocupar, porque al final esta gente se está quedando desde hace mucho tiempo en la frontera y son quienes de manera muy fácil caen en manos de la delincuencia, que los utiliza, como vulgarmente se dice, carne de cañón, lo que es un problema muy serio”.