Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Cd. Victoria, Tam.- La zona citrícola del municipio de Llera presenta una alarmante presencia de la plaga conocida como “dragón amarillo”, lo cual pone en riesgo las cerca de cuatro mil hectáreas de naranja, toronja, mandarina y limón que existen en la zona.
Ricardo Sepúlveda Cantú, dirigente de los citricultores del sector social en la zona centro del estado, admitió que se trata de una situación preocupante.
“Hay una alarmante presencia del sílido infectivo que ya afectó a muchos árboles. Es una situación que sí resulta preocupante, porque si atraviesa la sierra puede provocar que la plaga se extienda rápido hacia municipios como Victoria, Padilla, Güémez e Hidalgo”.
El también expresidente del Comité Estatal de Sanidad Vegetal, dijo que el combate a la plaga en Llera se dificultará, porque la mayor parte de los 400 productores de la zona tienen superficies de cítricos muy pequeñas.
“La mayoría tiene una hectárea, una hectárea y media, o dos hectáreas, y por esa razón no les interesará mucho hacer trabajo de fumigación para combatir la plaga, porque es muy poco lo que perderían”, explicó.
Bajo esa situación, el combate al “dragón amarillo” se complicará, porque se requiere que haya un ataque parejo con la aplicación de químicos y monitoreo permanente.
“De poco servirá que unos productores sí hagan trabajo de combate y otros no. Es una situación difícil”, señaló.
Sepúlveda dijo que bajo ese escenario serán las autoridades federales y estatales las que deberán asumir la responsabilidad total de diseñar una estrategia para frenar la plaga.
Advirtió que los productores y autoridades están obligados a reforzar el combate a la plaga, porque es una enfermedad que puede arrasar con las más de 40 mil hectáreas citrícolas del Estado.
El huanglonbing, popularmente conocido como “dragón amarillo” es una plaga que afecta a los cítricos y es provocada por la bacteria “candidatus liberibacter”.
La enfermedad, que destruye en poco tiempo los árboles, es transmitida por algunos insectos, entre ellos el llamado “Diaphorina Citri”.
Una vez que la plaga infecta un árbol ya no hay cura y debe procederse de inmediato a eliminarlo, para evitar que otros árboles sean contaminados.
Hace poco más de dos años se encontraron tres árboles infectados en huertas comerciales del municipio de Padilla, pero tan pronto se les detectó se procedió a derribarlos y retirarlos de la zona.
También se han encontrado árboles infectados en patios de algunas casas, e igual fueron sacrificados.
