México.- Un trato discriminatorio dijo una familia mexicana sufrir por parte de agentes de migración en el aeropuerto de Londres, Inglaterra.
Diana Briseño contó a EFE que su familia viajó a Europa porque su hija Andrea, de 12 años, es parte de un coro religioso en Guadalajara, que fue seleccionado para concursar en el festival Corearte, que tuvo lugar del 15 al 21 de octubre en Barcelona, España.
Antes de ese evento, ella, su esposo, su hija y un cuñado quisieron hacer algunas paradas para conocer ciudades europeas, por lo que compraron boletos de avión con destino a Londres, y posteriormente trasladarse a España.
Cuando llegaron al aeropuerto londinense unos agentes migratorios les preguntaron si eran mexicanos y los apartaron de los demás viajeros para llevarlos a un cuarto, donde los interrogaron durante poco más de una hora sobre cuánto dinero traían y a dónde se dirigían.
Relata Briseño que los funcionarios se rieron cuando ellos les explicaron a qué se dedicaban, que estarían en territorio europeo por varios días, e incluso cuando les demostraron que tenían recursos económicos para costear el viaje.
“Desde que llegamos nos dieron un trato muy discriminatorio por ser mexicanos. Nos dicen que a qué nos dedicamos, les contesto que soy enfermera de profesión y me contestan que una enfermera no gana para viajar hasta allá, que un mexicano no gana para viajar hasta Londres”, comentó.
De acuerdo con la afectada, sin permitir a los mexicanos que se comunicaran con su embajada, los agentes los obligaron a abrir su maleta y la revisaron entre risas y comentarios burlones.
“Al momento que terminan de revisar, cierran las maletas y el que la estaba revisando me avienta mi maleta y la de Andrea y me hace firmar una hoja. Le pregunté por qué lo hacía y no me contestó; solamente dijo que la firmara, pero pasó lo mismo con mi esposo”, relató.
Los mexicanos aseguran que los agentes no quisieron explicarles el contenido del documento firmado, aunque se vieron obligados a hacerlo debido a la insistencia de los funcionarios de que escondían droga.
“Ellos tienen el pensamiento de que todos los mexicanos somos narcotraficantes y yo estaba muy asustada porque pensaba que a fuerza nos podrían encasquetar (adjudicar) un paquete de droga, pero finalmente eso no sucedió”, comentó Briseño.
Por alrededor de nueve horas estuvieron retenidos los cuatro mexicanos en la sala y en ese tiempo no se les permitió tomar agua, ingerir alimentos ni ir al baño hasta que un agente les explicó que emitirían una alerta para que no pudieran entrar a la Unión Europea, por lo que serían deportados a México, lo que ocurrió horas después.
Briseño dice no saber las razones por las que recibieron este trato que califica como «denigrante», porque ellos contaban con todo en regla.
“Qué lo haya originado, no lo sé. Simplemente sé que nosotros viajamos con la ilusión de conocer ahí. No pretendíamos quedarnos ni a vivir, ni trabajar, ni mucho menos, porque nuestro destino final era Barcelona. Pero yo siento que sí fue discriminación hacia nosotros por ser mexicanos”, afirma.
EFE destaca que la familia ya interpuso una queja en la embajada británica en México y acudió a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que quedara registrado el incidente y se comenzara una investigación.
“Lo que pedimos es que nos reparen el daño de los viajes, porque sí fue bastante dinero el que perdimos por eso, y al menos una sanción para las personas que nos trataron así”, apuntó Briseño.
Con Información de:SDPnoticias