Publicado en la revista «Science», un estudio dice que las crías de la araña saltarina llamada Toxeus magnus, depende totalmente de la leche que segregan sus madres.
Las madres de las arañas saltarinas prolongan la lactancia y continúan alimentando y cuidando a las crías con su nutritivo fluido, parecido a la leche.
Este fluido contiene una cantidad de proteínas casi cuatro veces superior a la de la leche de vaca.
Según el estudio este comportamiento es parecido al de los mamíferos.
El descubrimiento sugiere que el cuidado materno a largo plazo es más común de los que se creía en el reino animal.
Con información de: www.abc.es