Una mujer de 52 años falleció en Hong Kong después de recibir una sobredosis de bótox en una clínica estética, el tercer caso de este tipo en menos de un mes en China.
El personal de la clínica avisó como a las 5 de la tarde del sábado de que la mujer, apellidada Cheung, se había desmayado tras recibir un tratamiento de bótox.
Tras ser trasladada en estado crítico al hospital Queen Elizabeth, el personal sanitario certificó su muerte a las 09.42 de la noche.
Según fuentes policiales citadas por el digital, la mujer habría recibido más de diez inyecciones de bótox en el centro, que todavía no se ha pronunciado al respecto.
La investigación continúa su curso y no se ha producido ningún tipo de detención hasta ahora.
La toxina botulínica, más conocida como bótox, es una neurotoxina utilizada como tratamiento de algunas enfermedades neurológicas y como producto cosmético para eliminar arrugas faciales. En altas dosis puede provocar parálisis muscular progresiva, dificultades respiratorias e incluso la muerte.
El pasado 1 de noviembre, una mujer de 41 años cayó enferma en China tras someterse en su casa a un tratamiento de bótox, que le provocó sensación de debilidad, dolor de garganta y dificultad para tragar.
Al día siguiente, una joven de 24 años ingresó en el hospital Queen Elizabeth tras recibir una inyección con la neurotoxina, lo que le causó náuseas, mareos y respiración entrecortada.
Con Información de: El Debate