Alfredo Guevara
El rendimiento de la producción por hectárea de sorgo, afectada por la helada de rocío, registrada en el mes de noviembre en municipios de la zona centro del estado, podría disminuir, al no registrarse precipitaciones pluviales hasta la fecha, admitió Ariel Longoria García.
Por ello, el Secretario de Desarrollo Rural consideró importante que además de seguir con el cultivo de sorgo, se debe promover la rotación de cultivos entre los productores, a efecto de que tengan otras alternativas que les permita hacer frente a este tipo de afectaciones.
De las 14 mil hectáreas que se vieron afectadas de manera parcial por la helada de rocío, estimó que el rendimiento de producción podría ser de poco menos de dos toneladas por hectárea, a menos de que lloviera y permitiera recuperar parte de las plantas dañadas.
“Prácticamente ya se terminaron de valorar, por parte del seguro catastrófico, los daños en esas 14 mil hectáreas promedio, donde es casi seguro que se obtendrá un rendimiento menor de sorgo por hectárea, sobre todo porque no ha llovido en las últimas semanas”, aseveró.
Longoria García recordó que, históricamente, los municipios de la zona centro de Tamaulipas presentan baja producción, que si se asocia a las condiciones que imperan en el campo, la helada de rocío que se registró en el mes de noviembre, hace que el rendimiento disminuya en forma importante.
Derivado de lo anterior, consideró que, sin dejar de lado la siembra de sorgo, los productores de esa región deben analizar la posibilidad de hacer una rotación de cultivos, que pueden ser un plus en la producción, destinando las tierras a la soya, cártamo y canola.
“Es una tarea importante que tenemos, tratar de persuadir a los productores e inculcar la rotación de cultivos, creo que es algo que se tiene que hacer, para que de esa forma los productores no sufran pérdidas por heladas e incluso, por sequías”, indicó.
Y es que, la mayoría de los productores se han dedicado la mayor parte de su vida a la siembra de los mismos cultivos, entre estos, sorgo y maíz. Cuando los nuevos tiempos y las condiciones de la tierra sientan las condiciones para que se dé una rotación en los sembradíos.