Ciudad de México. Por más de 30 años, los investigadores han estudiado los problemas que le genera al matrimonio el tener hijos, tomando en cuenta que puede repercutir en la situación económica, de tiempo, capacidad y la vida feliz en pareja.
Y como conclusión, se revelo que en efecto la relación entre los cónyuges sufre una vez que llegan los niños.
Según el profesor de psicología y director del Marriage and Family Studies Laboratory de Binghamton University, Matthew D. Johnson, la tasa de disminución en la satisfacción de una relación es el doble de baja para las parejas con hijos en comparación con los que no tienen.
Cuando se da un embarazo no planeado el impacto negativo es mayor, pero a pesar de que la satisfacción conyugal de los nuevos padres disminuye, las probabilidad de que se divorcien también disminuye.
Por lo tanto, el tener hijos puede repercutir en que pienses que tu vida es miserable, pero al menos sientes que tu pareja está siendo miserable junto ti.
Ahora, el impacto negativo en el matrimonio aumenta al enterarse que serán padres, y es lastimoso que las parejas piensen que tener hijos los acercará, sin embargo, esta creencia de que tener hijos mejorará el matrimonio, es un mito.
Con Información de: Excelsior