Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Cd. Victoria, Tam.-
Luego del homicidio violento de dos de sus compañeras, al menos diez agentes del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) han renunciado en los últimos 14 días.
Bajo reserva de anonimato, personal de la misma PGJE confirmó la desbandada de fiscales, y advirtió que la cifra de renuncias podría crecer en los siguientes días.
Tan solo de la Coordinación Estatal Antisecuestros renunciaron cuatro agentes del Ministerio Público asignados a las unidades del sistema acusatorio.
“En promedio han renunciado en estos días diez compañeros. Pero la cifra debe ser mayor, porque antes ya se habían ido varios”, mencionó una de las fuentes.
La principal razón de las renuncias es que los fiscales se sienten desprotegidos en el ejercicio de su trabajo.
“No hay garantías para trabajar. Hay compañeros que han sido amenazados y no les han autorizado protección”, añadió.
Para resolver el déficit de agentes del Ministerio Público en Ciudad Victoria, la PGJE está trayendo a personal de otras ciudades del estado.
La situación se complica porque las convocatorias para formación de agentes del Ministerio Público han tenido poca respuesta.
Además, de cada diez aspirantes se estima que al menos siete no aprueban los exámenes de control de confianza.
La desbandada de agentes del Ministerio Público se intensificó desde el pasado 21 de marzo, cuando fue asesinada la fiscal asignada a la Coordinación Antisecuestros, Patricia “N”.
La funcionaria salía de su casa, en el fraccionamiento Palomas, para llevar a sus hijos a la escuela, cuando fue atacada a balazos por varios sujetos que le quitaron la vida.
Antes, en diciembre pasado, la agente del Ministerio Público Erika “N” fue asesinada junto con el juez de control Abelardo “N”.
