Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Cd. Victoria, Tam.-
Durante el presente año, el Poder Judicial del Estado (PJE), de Tamaulipas invertirá cien millones de pesos para construir 15 nuevas salas de oralidad.
El magistrado presidente del PJE, Horacio Ortiz Renán, dijo que los inmuebles vendrán a aligerar las necesidades generadas por el Sistema de Justicia Penal Acusatorio.
Las salas de oralidad estarán ubicadas en aquellos municipios con mayor carga de trabajo, como Victoria, Matamoros, Reynosa, Nuevo Laredo y el sur del estado.
Algunas de las obras ya se iniciaron y el resto comenzarán en las siguientes semanas.
Ortiz Renán dijo que el Poder Judicial del Estado necesita con urgencia más infraestructura para enfrentar el aumento de asuntos en materia penal.
“Es tanta la carga de trabajo que hay audiencias que terminan a medianoche o en la madrugada, y mucho tiene que ver precisamente que no hay suficientes salas de oralidad”, refirió.
Sin embargo, calificó de normal el aumento de asuntos, porque el Sistema de Justicia Penal Acusatorio va apenas por su tercer año y se está afianzando.
Aclaró que la necesidad de infraestructura en el sistema de impartición de justicia será mayor conforme se vayan concretando reformas que llevarán la oralidad a todas las materias.
Por su parte, Rolando Barraza Pérez, presidente del Círculo Académico de Juristas de Ciudad Victoria, dijo que la necesidad del Sistema de Justicia Penal Acusatorio se da principalmente en el recurso humano.
Explicó que, por ejemplo, en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) las unidades generales de investigación están saturadas, porque las agencias del Ministerio Público son insuficientes para atender el volumen de carpetas de investigación que ingresan.
“He platicado con algunos agentes del Ministerio Público del sistema acusatorio y me dicen que están rebasados por tantos asuntos, pero lo peor es que no les dan las herramientas para ejercer su tarea porque tienen muy poco personal”, señaló.
En el caso del Poder Judicial, también es urgente aumentar el número de jueces de control para desahogar tantos asuntos que están judicializando los ministerios públicos.
