Mauricio Zapata.-
Cd. Victoria, Tam.-
Las Torres de Pánico instaladas en Ciudad Victoria, han dejado de cumplir su misión, ya que a lo largo de los últimos tres años, no han servido para alertar a las autoridades sobre situaciones de riesgo o emergencias.
Según un reporte de la Secretaría de Seguridad Pública, la ciudadanía no ha oprimido los botones de pánico, con los cuales se avisaba sobre algún evento de inseguridad.
En el 2013, se instalaron 43 torres de pánico, ubicadas en sitios estratégicos, con las cuales la ciudadanía podría alertar a las autoridades sobre hechos de violencia o solicitar alguna emergencia.
Según las autoridades de la dependencia, la población no hace uso de ese botón de pánico, sin embargo, estos sí están en funcionamiento, es decir, siguen habilitados para ese servicio.
Y es que, a decir de los propios usuarios, no saben del funcionamiento de estas torres y la mayoría solo las usa para conectarse a Internet, ya que además de eso, ofrece Wi-Fi gratuito para la sociedad.
En un sondeo realizado en diferentes calles de la Capital de Tamaulipas, la población dijo desconocer para qué sirven y cómo podrían activar el botón de pánico.
“Pues nunca nos han dicho para qué sirven y cómo funcionan. Yo la uso, a veces, para conectarme a Internet”, dijo Paola Contreras, estudiante universitaria.
“Sí sé que pueden servir para llamar a la policía en caso de una emergencia, pero a veces me da miedo, sobre todo si se trata de un hecho de inseguridad”, dijo Guadalupe Barrios, empleada gubernamental.
“Yo las veo, pero no sé exactamente para qué sirven, solo sé que uno se puede conectar gratis a Internet, aunque me da miedo conectarme a un sistema así”, precisó Luis Cardona, comerciante del centro de la ciudad.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública, estas torres tienen el mantenimiento debido, no obstante, es poca la ciudadanía que accede al servicio, ya sea de Internet o bien, para alertarlos sobre hechos de inseguridad.
“Pues yo creo que son elefantes blancos que ya no sirven de mucho, porque ni las autoridades nos dicen para qué sirven, ni nosotros los ciudadanos, preguntamos o nos interesa saber cómo nos pueden servir”, añadió Raúl Treviño, burócrata.
Para estas torres se invirtieron ocho millones 400 mil pesos, con presupuesto federal para su instalación y equipamiento, los cuales son operados y monitoreados por el C-4.