Recientemente un hospital veterinario de Boston recibió una gran sorpresa cuando una familia trajo a su bulldog después de que dejara de comer.
Resulta que el Angell Animal Medical Center encontró 19 chupetes para bebés en el estómago del perro, causa por la cual no quería comer.
La familia Wellesley comenzó a notar en el mes de abril que su perro Mortimer, de tres años, empezaba a tener náuseas antes de las comidas. Su dueña, Emily Shanahan, llevó a Mortimer al veterinario, quien le recetó medicamentos para resolver el problema.
Pero a Mortimer esto no le ayudó y finalmente dejó de comer por completo. Shanahan fue a Angell, donde le tomaron una radiografía y descubrieron los chupetes.
Al parecer, informaron los veterinarios, Mortimer había estado tomando los chupetes de los dos hijos de Shanahan a lo largo de los meses.
Estos chupetes fueron removidos utilizando un alcance médico que no requirió cirugía, por lo que Mortimer se recuperó y está de vuelta en casa.
Con información de: chispa.tv
