Jerusalén, 25 Jun (Notimex).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está abierto a mantener conversaciones con Irán sobre la eliminación de su programa nuclear, afirmó hoy en Jerusalén el asesor de Seguridad Nacional estadunidense, John Bolton, tras señalar que el silencio de Teherán es ensordecedor.
«El presidente mantiene abierta la puerta a negociaciones reales para eliminar de forma completa y verificable el programa de armamento nuclear de Irán, sus sistemas de misiles balísticos, su apoyo al terrorismo internacional y otras conductas malignas en todo el mundo», dijo Bolton de acuerdo con un despacho del diario The Jerusalem Post.
«Todo lo que Irán tiene que hacer es cruzar esa puerta abierta», señaló el asesor de la Casa Blanca, que sin embargo dijo Teherán no muestra ninguna evidencia de que haya tomado la decisión de renunciar a las armas nucleares.
«Mientras hablamos los diplomáticos estadunidenses, en todo el Medio Oriente está surgiendo un camino hacia la paz», dijo Bolton. «En respuesta, el silencio de Irán es ensordecedor», agregó.
Bolton se encuentra en Jerusalén, donde este martes participa en un encuentro con sus homólogos de Israel y Rusia centrado en Siria y en Irán.
«Este encuentro no podría ser más oportuno. Nos reunimos en un momento particularmente crítico en Medio Oriente, ya que el régimen radical de Irán y sus satélites terroristas participan aún en más provocaciones violentas en el extranjero», según indicó el asesor de seguridad nacional.
La tensión entre Estados Unidos e Irán ha ido en aumento desde que hace un año Washington abandonó de forma unilateral el acuerdo nuclear iraní firmado en 2015 y volvió a imponer desde entonces sanciones contra Irán.
La víspera, el presidente Trump impuso nuevas sanciones financieras contra Irán, que afectarán al líder supremo Ali Jamenei y a ocho comandantes, además de advertir que seguirá aumentando la presión sobre Teherán.
Las tensiones entre Estados Unidos e Irán aumentaron el jueves pasado tras el derribo de un avión no tripulado estadunidense en el estrecho de Ormuz que, según Washington, estaba en el espacio aéreo internacional, pero según Teherán fue interceptado en sus cielos.