NUEVO LAREDO.- Macabra sorpresa se llevaron varias personas, cuando al acudir a visitar a su familiar al que tenían días de no ver, lo encontraron sin vida y en estado putrefacto.
El hallazgo del cuerpo sin vida de J. Encarnación “N” registrado en un inmueble de la colonia Guerrero se reportó a las 11:55 horas del pasado domingo.
Fue al recibirse un llamado por parte de la línea de emergencia C-4, reportando olores fétidos, al parecer un cuerpo en estado de descomposición en un domicilio ubicado en la colonia Guerrero, cuando agentes de la Policía Investigadora adscritos a la Unidad de Investigación se trasladaron hasta dicho lugar.
El sitio del hallazgo se encontraba ya resguardado y acordonado por elementos de la Policía Estatal Acreditable.
Al llegar al lugar, los agentes investigadores confirmaron la noticia, observando en el interior del domicilio el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino.
En el lugar se dio fe que el occiso viste una playera cuello redondo color amarillo, pantalón color gris, cinturón negro, tenis blancos y una gorra color rojo.
Cabe señalar que el cuerpo sin vida estaba en una silla y el lugar se encuentra en condiciones insalubres, por el estado en que se encuentra no es posible apreciar sus rasgos físicos.
En el lugar los agentes de la Fiscalía General de Justicia se entrevistaron con una mujer que se identificó como Petra, quien dijo ser prima del ahora fallecido.
La mujer identificó al occiso como J. Encarnación, quien se dedicaba a recolectar material para reciclar, no padecía de enfermedad alguna, y vivía solo en dicho domicilio.
La prima del hoy occiso mencionó que la última vez que lo vieron fue la semana pasada, ya que estuvo ausente de su domicilio durante esta semana, pero se encontraba bien, solo que ya no quería comer, y no tenía familiares que lo atendieran.
Al llegar a su casa el pasado domingo notaron un olor fétido, por lo que fue a ver a su familiar, encontrándolo sin vida y en estado de descomposición, dando aviso a las autoridades competentes, por lo cual se solicitó el apoyo de Servicios Periciales para el procesamiento del lugar.
Una vez realizada la inspección, así como las diligencias de fe ministerial y levantamiento del cadáver, el cuerpo sin vida fue trasladado al Servicio Médico Forense para la práctica de la necropsia de ley.