Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
Los estados de la zona norte del país enfrentan una presión no solo de los centroamericanos y los connacionales del sur del país que quieren llegar a los Estados Unidos, sino también de las deportaciones masivas.
Y es que, por acuerdos del Gobierno federal con los EU, ahora se podrá deportar de otras nacionalidades para que sean atendidos mientras enfrentan sus procesos para obtener visa humanitaria, lo que pudiera llevarse años, confirmó Mariana Rodríguez Mier y Terán.
La integrante de la Comisión de Asuntos Migratorios en la Cámara de diputados federales expuso que lo anterior crea una presión presupuestal y social en estados de la frontera norte.
Convino en que si bien hay interés de invertir en Centroamérica, a donde se han enviado 30 de cien millones de dólares para fomentar el desarrollo económico que evite la migración hacia EU, de qué manera se apoyará a los estados del norte del país.
“Qué medidas habrá para estados fronterizos con EU para que los municipios hagan frente a servicios, albergue, salud, vivienda y otros que se requieren para atender a los migrantes de otras nacionalidades que esperan visa humanitaria, los que son deportados y los que quieren ir al vecino país del norte”, cuestionó.
Citó que la estancia de centroamericanos en la zona norte del país, en espera de obtener una visa humanitaria para ingresar a los EU podría llevarse años, a los que tendría que estar atendiendo por parte de autoridades fronterizas.
Recordó que hasta ahora, el Gobierno de Tamaulipas y los ayuntamientos de la zona norte han tenido que enfrentar esta problemática con recursos ordinarios que ya se agotaron y extraordinarios que se están aplicando.
Lo anterior, luego de que no haya recursos para el Fondo de Apoyo al migrante, además de que se aplicó una reducción del 26 por ciento al presupuesto del Instituto Nacional del Migrante y de un 22 a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados para este año.
