El pequeño Anthony Ávalos, de tan solo diez años de edad, fue torturado por su madre y el novio de ella; lo lanzaron contra la pared, le pegaron con un cinturón, le echaron salsa picante en la cara, lo colgaron boca abajo, lo dejaron caer de cabeza, abusaron sexualmente de él y lo obligaron a arrodillarse sobre arroz. Todo durante los últimos cinco días de su vida.
La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Los Ángeles, lugar donde ocurrió el crimen, anunció que buscará la pena de muerte para Heather Barrón, de 29 años, y su novio Kareem Leiva, de 32, acusados de torturar y asesinar al hijo de ella.
Después de los cinco días en que fue torturado el niño, Barrón llamó al 911.
Más tarde Anthony fue trasladado de emergencia a un hospital local. El menor murió el 21 de junio de 2018. Su mujer aseguró que su hijo había sufrido una caída; sin embargo, las autoridades iniciaron una investigación.
El novio de su madre, Leiva, agredió físicamente a Anthony por decir que le gustaban los niños. Le exigieron quedarse en una esquina de la casa, y no le permitieron ir al baño.
La pareja se declaró inocente durante el proceso legal; sin embargo, la evidencia encontrada por la fiscalía apuntó a su culpabilidad.
La abuela de Anthony, Concepción Ramírez, se mostró a favor del veredicto, “No le deseo eso a nadie, pero ellos tienen que pagar”, señaló.
Con información de: noticieros.televisa.com
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