Completamente desprotegidos quedaron los miembros de una humilde familia, luego de que su domicilio se incendiara y arrasara con todas sus posesiones.
La escena ocurrió sobre las calles Humanidad con Armonía de la colonia Vamos Tamaulipas Primera etapa.
El siniestro, que inició cerca de las 16:30 horas de la tarde, fue atendido por el personal de Bomberos municipales, quienes lograron sofocar las llamas, las cuales para entonces ya habían devorado todas las pertenencias de la familia.
Al lugar también se presentaron elementos de la Cruz Roja para atender a un ama de casa y a dos de sus pequeños hijos, quienes sufrieron crisis nerviosas.
Finalmente, los paramédicos informaron que tanto la mujer como los menores no ameritaban traslado a un hospital.
La familia está conformada por, Julieta Olguín Martínez de 42 años, su esposo Martín Hernández Acuña, de 55 años, sus hijos Alicia Guadalupe, de 13 años, Antonio Hernández de tres y quien padece de una enfermedad del corazón, además de Erika Hernández de 12 años, Martín Hernández de siete años, Adriana Hernández de cinco y Julia de 11.
Ya más tranquila, el ama de casa relató al personal de Bomberos que acababa de cocinar frijoles con leña y que posteriormente apagó las llamas para poder ir por su hija al kínder.
Detalló que cuando regresó encontró su domicilio envuelto en llamas entrando casi en seguida en pánico, pues dos de sus hijos se habían quedado al interior de la casa.
Afortunadamente todos lograron salir a tiempo antes de que todo se consumiera y quedará reducido a cenizas.
Fueron vecinos de la misma colonia, quienes al percatarse de los hechos marcaron a través de sus teléfonos celulares al número 911, para solicitar la presencia de los Bomberos.
Minutos más tarde, los “tragahumo” se presentaron en el lugar para poder sofocar las llamas.
En entrevista y con lágrimas en los ojos, la familia pidió a la ciudadanía su apoyo para poder conseguir ropa, utensilios de cocina, entre otras cosas.
El personal de Bomberos declaró el domicilio como pérdida total y la familia quedó sin techo dónde dormir.