Después de 25 años de criar a la que creía su hija genética, Joe y Jennifer, un matrimonio de Ohio, descubrió que su hija había sido procreada con otro espermatozoide diferente al del padre.
La pareja había pasado mucho tiempo intentando tener un hijo hasta que llevaron a cabo una inseminación artificial en una clínica, utilizando su propio material genético o al menos así creían. Tiempo después tuvieron a su primogénito Rebecca.
Sin embargo, como le informan a NBC News fue gracias a un regalo de navidad de un kit de ADN en el hogar el que reveló que Rebecca no estaba relacionada genéticamente con su padre Joe.
“Es difícil explicar la conmoción y la agonía cuando descubres que alguien a quien amas y cuidas, tu propia hija, no está genéticamente relacionado contigo” explicó Joe.
La pareja también informó que se encuartan entablando una demanda contra los responsables y exigen una compensación por los daños emocionales.
Mediante pruebas descubrieron que Rebecca está relacionada con cinco hombres que nunca antes había conocido
Con información de: www.debate.com.mx