José del Carmen Perales Rodríguez.-
Cd. Victoria, Tam.-
A pesar de que desde hace casi dos años y medio (27 de abril de 2017) la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) emitió una alerta sanitaria con respecto a los vapeadores o cigarros electrónicos, cuya comercialización en el país es ilegal, a nivel local no existe ninguna restricción para su venta.
En un recorrido por varios “cubos”, así como por medio de un rastreo simple en grupos de ventas en redes sociales, se pudo constatar que por menos de 250 pesos se puede adquirir un dispositivo electrónico de este tipo.
En aquella ocasión, la Cofepris informó que a esa fecha habían asegurado más de 12 mil piezas de cigarros electrónicos, vapeadores y accesorios “que se comercializan ilegalmente en México en contravención a lo ordenado por la fracción VI del artículo 16 de la Ley General para el Control del Tabaco”.
Asimismo, cita que “con fecha 21 de abril del 2017 se publicó la alerta sanitaria titulada: Cofepris alerta que está prohibido comerciar, vender, distribuir, exhibir, promocionar o producir cualquier objeto que no sea un producto del tabaco, que contenga alguno de los elementos de la marca o cualquier tipo de diseño o señal auditiva que lo identifique con productos del tabaco”.
La Cofepris subraya que “por sí misma o a través de las autoridades estatales que conforman el Sistema Federal Sanitario, continuará con las acciones de vigilancia y aseguramiento de cigarros ilegales, cigarros electrónicos, vapeadores o productos que sin ser derivados del tabaco tengan las características de productos de tabaco”.
Lo anterior, precisa, de conformidad con lo ordenado por la Ley General para el Control del Tabaco; así como suspendiendo la publicidad ilegal de dichos productos, ordenando su aseguramiento, destrucción e imposición de multas económicas por infracción a la regulación administrativa, independientemente de la responsabilidad penal que pueda derivar por la comercialización de productos ilegales.
Finalmente, advierte que “las empresas de paquetería y mensajería con servicios internacionales deberán abstenerse de distribuir cigarros electrónicos, vapeadores o accesorios que provengan del extranjero, por lo que podrán hacerse acreedoras a sanciones administrativas por montos cercanos al millón de pesos por infracción cometida”.
