La tortura en contra de seres vivos en un delito grave aun y cuando su propósito es el de aprender como en un laboratorio, el caso que se presenta a continuación es el de un laboratorio ubicado en Baja Sajonia, Alemania.
Todo comenzó cuando las organizaciones Cruelty Free International Y Soko Tierschutz, consiguieron imágenes de monos, perros, gatos y conejos terriblemente torturados, las imágenes fueron conseguidas gracias a un infiltrado que se coló como un nuevo trabajador en el laboratorio de la Farmacología y Toxicología de LPT en Mienenbuttel.
En las imágenes se muestran a los monos atados del cuello con arneses, perros en jaulas con sangre y gatos encerrados con sus patas rotas.
El infiltrado dijo que a menudo los animales eran obligados a ingerir sustancias tóxicas, las cuales les causaban sangrado, dificultades para respirar, fiebre, desnutrición, problemas de piel y terminar muriendo.
De acuerdo con medios locales, la Oficina Estatal de Protección al Consumidor y Seguridad de Baja Sajonia, presento cargos ante la fiscalía por maltrato animal.
La directora de CFI, pide que se haga una modificación a las leyes en contra del maltrato animal.
«Nuestra investigación ha descubierto un terrible sufrimiento animal, cuidados inadecuados, malas prácticas e infracciones de las leyes europeas y alemanas. Estamos pidiendo que se cierre LPT», declaró.
Con información de: milenio.com
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