Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Cd. Victoria, Tam.-
Durante la sesión ordinaria del pleno legislativo celebrada este domingo, algo quedó claro: el encontronazo aquel del seis de octubre en la tribuna legislativa, entre diputados del PAN y Morena, fue una simple “llamarada de petate”.
A un mes del inicio de su ejercicio, la LXIV Legislatura entró en una especie de letargo.
Las bancadas opositoras guardan un sospechoso silencio. Llegaron con el hacha de guerra en la mano, pero de pronto las envolvió un espíritu sumiso.
La misma Carmen Lilia Canturosas Villarreal, quien prometía ser la diputada más incomoda y aguerrida, se ha limitado a ser un testigo más del desarrollo de las sesiones. Su trabajo parlamentario ha consistido en simplemente activar el botón electrónico de votación y se entretiene en el parloteo con sus vecinos de curul.
En las cuatro sesiones ordinarias que ha desarrollado el pleno, ya suman al menos 30 las iniciativas presentadas, de los que la tercera parte son puntos de acuerdo para hacer exhortos a alguna autoridad. Lo mismo que antes.
Los panistas, por su parte, se dejan querer. Al no tener enfrente quién les haga sombra monopolizan la tribuna. De las 13 iniciativas presentadas ante el pleno legislativo en la sesión de este domingo, ocho fueron suyas.
Con ello, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Gerardo Peña Flores, ni sufre ni se acongoja. “Mata” el aburrimiento con su celular y bebiendo café.
En el apartado de asuntos generales hubo un destello de debate. La priista Olga Garza subió a tribuna para reclamarle a la morenista Edna Rivera López que hubiera presentado una iniciativa reclamando apoyo para los estudiantes discapacitados, cuando el Gobierno federal está haciendo recortes a la educación.
“Yo traigo otros datos, perdón”, le dijo la priista con sarcasmo, para luego recordarle que la Federación ha venido cerrando los Centros de Atención para Estudiantes con Discapacidad, a través de los cuales se apoyaba a cerca de 27 mil estudiantes con algún padecimiento físico o mental.
Rivera pidió turno por alusiones personales, para aclararle que su interpretación de la propuesta era equivocada. Le explicó que su demanda de apoyo era para estudiantes discapacitados de educación básica y le precisó que los Centros a que se refiere no existen en Tamaulipas.
Ambas regresaron dos veces a la tribuna para contestarse las imputaciones, hasta que el presidente de la Mesa Directiva, Joaquín Hernández Correa, les cerró el debate, “porque las iniciativas son para discutirse en comisiones y no en asuntos generales”.
“Eso es lo que le digo yo diputado presidente: ponga orden”, le reclamó Rivera López.
Lo bueno es que los integrantes de la LXIV Legislatura concluyeron este fin de semana el curso de capacitación a que fueron sometidos durante 30 días. Esperemos que el aprendizaje que adquirieron comience a reflejarse en las siguientes sesiones.
Por cierto, los parlamentarios regresarán a su curul este próximo miércoles. Es así porque a partir de noviembre el pleno sesionará a mitad de semana como ha sido una costumbre. La de ayer fue la última sesión realizada en domingo.
