Rogelio Rodríguez Mendoza
Cd. Victoria, Tam. – Por el momento no está contemplado un incremento al kilogramo de la tortilla, aseguró Enrique Yáñez Reyes, dirigente estatal de la Federación de Industriales de la Masa y la Tortilla.
Sin embargo, no descartó que ello pueda ocurrir a partir de las primeras semanas del 2020, en caso de que se encarezcan los combustibles como consecuencia del aumento al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
Bajo esas condiciones, dijo, existe incertidumbre sobre el precio de la tortilla, que actualmente oscila entre los 18 y 20 pesos el kilogramo.
Detalló que un eventual encarecimiento de la gasolina, diésel y gas incrementaría los costos de producción de la tortilla, lo cual obligaría a hacer un ajuste al kilogramo del alimento.
Desde hace muchos años, el precio de la tortilla no está sujeto a un precio oficial, porque se mueve en relación a la ley de la oferta y la demanda, por lo que queda a criterio de los mismos industriales del ramo aplicar un aumento.
Yáñez reiteró que por el momento no se justifica un aumento al precio de alimento, porque el costo de los insumos se mantiene estable, pero insistió que en caso de que el 2020 inicie con una cascada de aumentos derivado del alza del IEPS a los combustibles, entonces las condiciones serán otras.
“El escenario económico es incierto, pero se mantiene una expectativa positiva para este sector productivo”, indicó.
Durante los últimos días han surgido rumores sobre un inminente aumento al IEPS aplicable a la gasolina y diésel, lo cual disparará los precios de los combustibles.
Presuntamente el IEPS para la gasolina Magna (menor a 82 octanos) subirá de $4.81 a $4.95, es decir 14 centavos más, mientras que para la gasolina Premium (mayor a 91 octanos) se elevará de $4.06 a $4.18, con un incremento de 12 centavos.
El impuesto al diésel pasará de $5.28 a $5.44, lo que representará un incremento de 16 centavos.
Al respecto, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha asegurado que el próximo año iniciará sin sorpresas de gasolinazos o aumentos a los impuestos, como ocurría en otras administraciones.