Este año 2020, como bien sabemos es un año bisiesto, lo que quiere decir que cuenta con un día más en su calendario, dando un total de 366 en vez de 365, además como bien sabemos este día se agrega al mes de febrero, pero ¿porqué el día más?
Esto se repite cada 4 años y se refleja durante el mes de febrero, alargándose un día más a diferencia de los 28 que usualmente tiene. El nombre se deriva del latin bis sextus dies ante calendas martii, que significa ‘repítase el sexto día antes del primer día de marzo’.
En una forma astrológica se puede interpretar que el origen del fenómeno del Año Bisiesto es debido al tiempo que tarda la tierra en dar la vuelta alrededor del Sol, el cual es de 365 días con 5 horas, 48 minutos y 45.5 segundos.
Pero en la actualidad, solo utilizamos los 365 para nuestro calendario, por lo que terminan sobrando unas cuantas horas por año. Este problema derivó en establecer un año bisiesto cada cuatro años aumentándose un día en el segundo mes, recompensando así las casi seis horas que se pierden por año.
El origen del año bisiesto se remonta al año 46 a.C. donde gracias a un error de cálculo en el calendario romano, no era tomado en cuenta el tiempo de traslación de la tierra alrededor del sol. Por esto, Julio Cesar fue asesorado por el astrónomo Sosígenes de Alejandría, fue impuesto el calendario juliano.
Fue así que aquel año, (46 a. C.) tuvo la peculiaridad de contar con 445 días para compensar los que se habían perdido anteriormente y lo que lo llevó a ser conocido como el Año de la Confusión.
