Las desapariciones no paran en el Estado de México y durante la temporada de vacaciones se detuvieron todas las investigaciones, mientras se pierde tiempo importante que podría ser empleado en la búsqueda de los desaparecidos como es el caso de Magali Guadalupe Alamilla Chávez, quien se encuentra desaparecida desde el 15 de diciembre. Mientras los oficiales descansan su familia vive con tristeza y desesperación.
De acuerdo con el testimonio de la familia, Magali salió el 15 de diciembre por la tarde a comprar un elote cerca de su casa ubicada en Joyas de Cuautitlán, pero al pasar las horas ella ya no volvió, su familia preocupada inició una campaña de búsqueda en redes sociales.
Al no encontrar respuesta por redes sociales, recurrieron a Odisea de la Fiscalía mexiquense, la familia iba en busca de apoyo y lo único que consiguieron fue que esta dependencia lanzara un boletín de búsqueda en vez de iniciar una investigación o tomarle importancia. Al notar el “apoyo” recibido, la madre decidió acudir a la casa de la mejor amiga de su hija, iniciando su propia investigación, como es en todos los casos.
Posteriormente, la madre de Magali durante su trabajo de investigación empezó a atar cabos y dio con el nombre de Juan Carlos Escobar Villalba, quien había formado parte del grupo “Doble AA”, al que pertenecía el abuelo de la joven y que también había ido a sepelio del mismo, acercándose a la familia y a la joven.
Por ahora, las autoridades de la dependencia de gobierno han solicitado a la familia toda la información recabada, para que cuando el oficial a cargo regrese de sus “merecidas” vacaciones, pueda resolver comenzar con la localización de la menor.
El día que Magali salió de casa vestía un pantalón de licra de color gris, blusa de un color gris claro de manga corta y zapatos dorados.
Por su parte, felices vacaciones a los oficiales del Estado de México, porque trabajo les espera y mucho.
Con información de: www.excelsior.com.mx