En la ciudad de Roma, Italia, la policía capturo a una fugitiva disfrazada de monja, la cual estuvo 2 años escondida en distintos conventos.
La mujer de 47 años, escapó de Silicia después de haber recibido una sentencia de 2 años de prisión en 2017.
La estafadora huyo al norte de Italia donde logro hacerse pasar por monja para poder entrar a distintos conventos, argumentando problemas de salud.
Una de las monjas que sospecharon de ella, afirmó que las historias que contaba la mujer tenían muchas contradicciones, además de que constantemente cambiaba sus versiones o datos sobre la enfermedad que supuestamente tenía.
La mujer fue arrestada y ahora enfrenta también cargos de uso de identidad falsa, además de fraude.