El coronavirus en México continúa su paso, de acuerdo con cifras oficiales, hasta el domingo 26 de abril, la Secretaría de Salud (SSa) tiene registrados 14,677 casos y 1,351 decesos relacionados a esta enfermedad.
En la conferencia vespertina celebrada en Palacio Nacional, José Luis Alomía, jefe de epidemiología, explicó que la región de Las Américas continúa siendo la que más casos nuevos de COVID-19 aporta a nivel mundial con un 47.0% de aportación en comparación con Europa que sólo aporta el 41.7% de casos totales.
Por otra parte, en tierra azteca, la curva epidémica continúa pronunciandose a la alza; sin embargo, Hugo López-Gatell, subsecretario de prevención y promoción de la salud, explicó que el comportamiento del SARS-CoV-2 va de acuerdo a lo esperado según distintos especialistas.
Cabe mencionar que el subsecretario declaró oficialmente la entrada de la Fase 3 de la epidemia al país el pasado 21 de abril durante la conferencia presidencial matutina. Esto quiere decir que las autoridades sanitarias ya tenían previsto el incremento pronunciado de casos nuevos y decesos relacionados al COVID-19.
En este caso, el gobierno presidido por Andrés Manuel López Obrador intensificó las medidas de aislamiento social para prevenir el contagio del virus; no obstante, el epidemiólogo especificó, ese mismo día por la noche, que existen alrededor de 1,000 municipios donde el avance de esta enfermedad es casi nulo y que por tal motivo, esperan levantar la Jornada Nacional de Sana Distancia en esas demarcaciones el 18 de mayo y no el 30, como se tenía previsto.
“Vamos bien en la reducción de contagios de #COVID19. En los municipios sin transmisión podremos retirar las Medidas de Seguridad Sanitaria el 18 de mayo si seguimos actuando con responsabilidad y disciplina”, escribió en un video que publicó en su cuenta oficial de Twitter.
Tal es el caso del municipio de San Pedro Garza García, en Nuevo León, que en las últimas dos semanas sólo han registrado cinco casos nuevos de COVID-19 y que por tal motivo, el gobierno municipal declaró la Fase 4 de la contingencia, ésta es cuando el número de casos nuevos y decesos empieza a disminuir. Gradualmente se comienza una reincorporación a las actividades económicas conservando las medidas preventivas de transmisión y de monitoreo para evitar retroceder a alguna fase anterior y el gobierno comienza a matematizar el impacto de la pandemia.
En conformidad con los conteos oficiales, las cinco entidades más afectadas son la Ciudad de México, el Estado de México, Tabasco, Baja California y Sinaloa; asimismo, reportan que las cinco menos afectadas son Campeche, Nayarit, Durango, San Luis Potosí y Colima.
Del total de casos 35% son casos activos, es decir, son casos detectados en un periodo menor a 14 días y aún representan riesgo de contagio; 15% son pacientes que trabajan en el sector salud y por algún motivo han sido contagiados por el COVID-19.
Ante estos datos, el gobierno federal, los gobiernos locales, la iniciativa privada y la sociedad civil decidió formar parte de la solución y coadyuvar de manera conjunta para combatir al SARS-CoV-2. Tal es el caso de la Central de Abasto de la Ciudad de México que, a pesar de ser un centro que provee a los capitalinos de los elementos más básicos para su subsistencia, estableció que por el bien de todos, las personas vulnerables no tendrán acceso a sus instalaciones.
Esta estrategia fue implementada después de registrar 23 casos y dos decesos por coronavirus derivados de la gentrificación que ocurre en aquel lugar. Este plan incluye filtros de seguridad sanitaria en los accesos al mercado, en donde tomarán la temperatura de quienes entren y definitivamente no dejarán pasar a personas adultas mayores, mujeres embarazadas y niños.