Esta semana el elenco de la segunda parte de “Sexo, pudos y lágrimas” ha regresado a grabas en el Estado de México, para de esta forma finalizar el filme, con un riguroso protocolo de sanidad y un equipo de producción que pasó de 200 a 80 personas para de esta forma reducir los riesgos de covid-19.
De esta forma, la película de Warner Bros, producida por Matthias Ehrenberg, se ha convertido en la primera en retomar su actividad en el país, después de cuatro meses de una pausa obligatoria debido a la pandemia.
«Hace 10 años, con la influenza, me tocó parar con ‘No eres tú, soy Yo’ y la verdad no me esperaba esto. La ocasión anterior no fue como ahora, realmente no estábamos preparados para algo así; nosotros paramos el 19 de marzo, íbamos en la semana siete y solo nos faltaba una más de rodaje para terminar la película, pero tuvimos que parar y no sabíamos qué pasaría en estos meses», comentó el productor Matthias Ehrenberg. «Estos meses que han trascurrido han sido extraños: por un lado estaba el miedo y la paranoia ante lo desconocido y por el otro la angustia por la chamba y sobre cómo se iba a arrancar. Confieso que estos meses sí fueron tremendos, porque no sabíamos cómo empezar ni cómo implementar los protocolos de salud, nadie lo había hecho antes».
En junio, Ehrenberg dio los primeros pasos a la nueva normalidad. Lo primero fue realizar un scouting con los jefes de cada equipo para preparar el set, esperaron el cambio de semáforo en el Estado de México y cuando fue posible volver, lo hicieron.
«La gente se sintió bien, implementamos los protocolos, llenamos los cuestionarios, se respetó la distancia social y se monitoreó al elenco y al equipo de producción», dijo Matthias. Cuando fue necesario llamar la atención, lo hizo.
«Lo principal aquí es la salud», explicó Ehrenberg, quien por cierto estima que los costos de producción se incrementarán considerablemente debido a los cambios que exige la nueva era.
«En un rodaje grande sí implicará una inversión de alrededor de 20 por ciento extra para implementar protocolos de salud, alimentación, doctores. Es algo nuevo y nos debemos adecuar».
Relaciones humanas
Sexo, Pudor y Lágrimas 2 pondrá en pantalla al elenco original para contar su historia y la de sus hijos, pero con un enfoque distinto sobre las relaciones humanas.
«Veinte años después se tiene que hablar de otras cosas por completo, como la inclusión, las diferentes formas de amor entre un padre y su hijo, dos amantes, los esposos que llevan 20 años de casados. Hay infinidades de formas de amor», dijo Alonso Íñiguez, director de la cinta.
La ventaja de reanudar el rodaje en la era Covid-19, al menos para esta producción, fue contar con una locación abierta.
«Eso nos benefició respecto a la concentración de personas y fuimos muy puntuales con los protocolos, porque estamos sentando un precedente: si esto sale mal, podemos desestabilizar a toda una industria», agregó Íñiguez, respecto a las medidas y la locación que está enmarcada por grandes jardines y una edificación antigua.
El llamado fue desde las primeras horas de la mañana para la escena en cuestión: una sesión de yoga en un retiro espiritual.
«La idea de estar con más de dos personas me parecía impresionante; comenzamos ayer y al llegar a ver todo esto me impresioné, parecían hordas, pero luego todo fluyó y ahora estamos emocionados por concluir la película», explicó la actriz Mónica Dionne, quien para la entrevista utilizó su habitual careta de protección.
«Las escenas sí se tuvieron que transformar por el contacto físico, pero nada que afecte la esencia de la película; tenemos el mismo espíritu y riesgo de la primera cinta, pero con un sentido de la sexualidad distinto: la sexualidad cruzó barreras, las relaciones van más allá de la monogamia, del matrimonio. La historia es mucho más incluyente», agregó Ximena Romo, uno de los nuevos rostros de esta película, quien dará vida a un personaje bisexual.
«Hay muchas formas de amar», dice Paco Rueda, quien interpreta a Benny. «La energía de esta película es otra, hay formas distintas de pensar y sí hay un cambio que esperamos que le guste a la gente; la visión del sexo cambió y lo que tratamos de decir es amemos, de eso trata la película, no estamos en un solo lugar y no hay etiquetas. Es muy padre transmitir este mensaje de amor a través de la película».
Sexo, Pudor y Lágrimas 2 arrancó su rodaje en febrero de este año, pero interrumpió su actividad a mediados de marzo, cuando se decretó contingencia sanitaria en el país.
Cuatro meses a la distancia, unas 80 personas de 30 mil que se vieron perjudicadas en la industria por la crisis del covid-19 estuvieron de vuelta con este rodaje.
Susana Zabaleta, Cecilia Suárez, Jorge Salinas y Mónica Dionne forman parte de la historia que también se nutrirá de nuevos talentos: José Ángel Bichir, Ximena Romo y Paco Rueda.
Con información de: mty.telediario.com