BOSTON (AP) — Por segunda vez en una década, una mujer de Nueva Hampshire recibe un trasplante de cara. Carmen Blandin Tarleton, que quedó desfigurada debido a un ataque de su exesposo, es la primera estadounidense y segunda persona en el mundo sometida a la operación, cuando el primer trasplante empezó a fallar después de seis años.
Tarleton sufrió quemaduras en el 80% de su cuerpo y quedó ciega cuando su esposo Herbert Rodgers, de quien estaba separada, la golpeó con un bate de béisbol y la bañó con lejía porque estaba convencido de que tenía relaciones con otro hombre. En 2009 se declaró culpable de mutilación y recibió una condena de 30 años. Murió en la cárcel en 2017.
El trasplante con donante anónima fue realizado en el Brigham and Women’s Hospital de Boston en julio. La enfermera retirada de 52 años espera regresar a su rutina normal, alterada al fracasar el primer trasplante hace un año.
“Estoy feliz”, dijo Tarleton en una entrevista telefónica exclusiva desde su hogar en Manchester. Aún se recupera de la operación, de manera que no se han dado a conocer fotos de su nueva cara.
“El dolor que sentía se ha terminado”, dijo. “Es un nuevo capítulo en mi vida. He esperado durante casi un año. Realmente estoy feliz. Es lo que necesitaba. Conseguí una gran donante”.
Más de 40 personas en el mundo, 16 de ellas en Estados Unidos, han recibido trasplantes de cara. Ninguno de los estadounidenses había perdido la cara donada antes de Tarleton.
El doctor Bohdan Pomahac, que realizó el primer trasplante, tenía dudas de hacer el segundo y prefería la cirugía reconstructiva, pero su equipo se convenció de las ventajas de un segundo trasplante después que Tarleton describió cómo el primero mejoró su vida.