Alfredo Guevara
La ampliación del plazo que concedió el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés), permitirá que todos los becerros que están en proceso se puedan exportar a más tardar el 31 de agosto, dijo Ariel Longoria García.
El Secretario de Desarrollo Rural estimó que a la fecha, a días de que cierre el ciclo de comercialización con los EU, se han exportado alrededor de 125 mil cabezas de ganado, es decir, un diez por ciento menos de lo enviado en el pasado periodo 2018-2019.
Y es que, el USDA había decidido imponer nuevas normas a la importación de ganado de México a Estados Unidos, las cuales entraban en vigor el 15 de agosto, es decir, 16 días antes de que venciera el ciclo 2019-2020.
No obstante, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos concedió una ampliación de un mes para que entrara en vigor esa nueva disposición, lo que permitirá que ningún becerro se quede en los corrales y puedan ser exportados al vecino país del norte.
“Había el riesgo de que todos esos becerros, al no haber exportación que quedaran acuarentenados y se comercializaran en el mercado nacional perdiendo su valor, por eso consideraron los ganaderos como benéfica la decisión de USDA” explicó.
Longoria García comentó que ya dependerá de la calidad de la carne y la raza del ganado que se exporte el precio, dado que en el mercado norteamericano se clasifica en nivel uno, dos y tres.
“El precio varía según la calidad y la raza del animal, el mejor es de uno 50 dólar por libra, de ahí para abajo disminuye el valor de los becerros” señaló.
Comentó que la disminución del diez por ciento en la exportación en este ciclo, comparativamente con la del 2018-2019, se debe a la sequía que se registró en la mayor parte del Estado, pero que afectó los lugares por tradición ganadera.
“Con la nueva determinación de USDA, los ganaderos podrán hacer el barrido en sus predios para seguir exportando” estableció.
