¡Se terminó la canícula! Hoy sábado 22 de agosto, le decimos adiós a la temporada más calurosa del año, la cual inició el pasado 23 de julio.
La canícula es un evento climático que ocurre durante la temporada de verano y se caracteriza por ser de sequía, es decir, una disminución o ausencia de lluvia. El Instituto Mexicano de Tecnología del Agua declara que la canícula “se presenta en algunas regiones del país entre los meses de julio y agosto debido a que las lluvias disminuyen, al mismo tiempo que se dan altas temperaturas”.
Además, las lluvias disminuyen debido a que los vientos alisios, al soplar con fuerza desde el Este, impiden la formación de nubes sobre el océano, con lo cual se reducen las lluvias en la parte del territorio continental.
Como dato curioso, se dice que la palabra deriva de “canes”, que significa “perros”, y su alusión al fenómeno de calor abrasivo tiene una base astronómica, ya que se refiere a la constelación del Can Mayor (Canícula) y su estrella Sirio “La Abrasadora”, cuya primera aparición en el horizonte coincidía con el fenómeno de calor excesivo.
Se cuenta que nuestros antepasados creían que cuando esto ocurría la mencionada estrella sumaba su calor al mismo del Sol, y daba lugar al período más cálido y menos lluvioso del verano.
Este evento se caracteriza por temperaturas superiores a 37 grados Celsius, disminución de lluvias, calentamiento del aire y cielos despejados.
En México, los estados con mayor afectación son Campeche, Colima, Chiapas, Guerrero, Hidalgo, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Yucatán.