José del Carmen Perales Rodríguez.-
Cd. Victoria, Tam.-
De los 45 restaurantes que cerraron en Victoria a lo largo de los cinco meses y medio que lleva la pandemia, al menos 30 volverán a operar conforme se consolide la fase dos de reactivación económica que entró en vigor a partir de este martes.
Sin embargo habrá alrededor de 15 que podrían ya no volver abrir, lamentó Jorge Bello Méndez, presidente local de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac).
Al mismo tiempo el empresario precisó que pese a este avance en el tema económico, no pueden perder de vista que la emergencia sanitaria prevalece por lo que mantendrán las medidas de seguridad, así como harán el exhorto a la población en este sentido.
«Hasta hace dos semanas contábamos con 40 restaurantes cerrados y el tope que alcanzamos fue 45, pero al corte de la semana pasada ya se habían incorporado 20 más o menos y creemos que con esta fase dos, lograremos llegar a diez o 15 restaurantes cerrados», expuso.
Bello Méndez añadió que estos últimos serían los que más complicada tienen su situación financiera, por lo que existe la posibilidad de que ya no podrían abrir.
En cuanto a los beneficios de pasar a la fase dos, el empresario comentó que si bien solo es una hora más lo único que se incrementa la actividad en los restaurantes, es algo que ven como positivo y el inicio de incorporarse al trabajo como se venía haciendo.
«Los restaurantes habían estado sufriendo por el tema del horario, porque el calor ha sido muy intenso hasta las 21:00 o 21:30 horas, esto propició que los consumidores salieran ya muy tarde a cenar y 15 minutos antes de las diez los teníamos que correr, por lo que esta hora nos va ayudar mucho», destacó.
En este sentido Bello Méndez puntualizó que ya se le ve un rostro distinto a los empresarios, «porque nos va a dar una oportunidad mayor de encontrar el punto de equilibrio en los negocios porque el producto para llevar y el servicio a domicilio no era suficiente, ya que sacrificamos mucho y los gastos fijos nos estaban comiendo».