Arnulfo Mata Huerta.-
José Antonio Tadeo Núñez Ruiz fue en su corta existencia un deportista de puro corazón, ferviente aficionado al deporte de las dos ruedas y sobresaliente alumno de Rigoberto González, renombrado ciclista instalado en el Salón de los Inmortales de la Presidencia Municipal de Victoria.
“El Pitufo” era como más se le conocía en esta disciplina y “Rigo” su instructor lo recuerda de esta manera
“Réquiem para el gran ‘Pitufo’, inolvidables momentos vivimos juntos, viajamos por toda la República y siempre nos alegrabas los días con tus bonitas platicas, como no recordar aquellas cuatro medallas de Olimpiada Nacional y campeonato nacional que lograste ganar, gracias por todas esas satisfacciones que le brindaste a tu familia y amigos”, dice el pedalista veterano.
Y continúa: “Me llenaba de orgullo verte en el pódium de triunfadores y presumir que eras mi alumno y decirles que se llegó hasta ahí gracias a tu fortaleza física y mental, ya que para lograrlo tuviste que librar muchísimos obstáculos, pero gracias al apoyo de tu familia y tu disciplina y ganas de hacer bien las cosas, lograste ser uno de los grandes a nivel nacional en el bonito mundo del ciclismo, por todo eso y muchas cosas más, gracias mi querido amigo José Antonio Tadeo Núñez Ruiz, te llevo y te llevaré por siempre en mi mente y mi corazón, ya son 19 años de tu partida y aun duele y duele mucho, te quiero mucho mi campeón”.
Este jovencito también es recordado año con año con la tradicional carrera en su honor, misma que organiza Arturo Silva Infante, dirigente estatal de ciclismo, con la autorización de la familia Núñez Ruiz y en donde se dan cita numerosos ciclistas de distintas partes del estado.
