CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 27 (Agencias)
Toda una semana para debatir entre las emociones y la importancia de dos rivalidades catalogadas como clásicos: el Regio entre Tigres y Rayados y el Joven con América y Cruz Azul. Hoy, el duelo de celestes y azulcremas tuvo la misma emoción que un duelo de fase regular entre cualquier otro rival, cuestiones como el arbitraje o las circunstancias de una mala fortuna para las Águilas fueron las que le dieron emoción a un partido que en la cancha quedó a deber.
La presión y el señalado como obligado era Cruz Azul. Los argumentos fueron sencillos, de último minuto, Miguel Herrera perdió a su portero y capitán Guillermo Ochoa. Además, dos de sus centrales (Sebastián Cáceres y Emanuel Aguilera) salieron lesionados para desequilibrar la línea de cinco que el Piojo le había puesto a Siboldi con el objetivo de neutralizar el medio campo cementero, que domina Luis Romo y que desemboca en Jonathan Rodríguez.
Lo primero que lucieron en el partido fueron dos atajadas, una por bando. La primera fue de Corona, aunque se había marcado fuera de lugar, pero la jugada continuó y el arquero cementero se lució atajando un cabezazo picado de Henry Martín. Minutos después, apareció la polémica con un jaloneo de Santiago Giménez sobre Giovani dos Santos que no fue señalado.
La segunda fue de Óscar Jiménez, quien entró de cambio por Memo. Elías Hernández disparó con la zurda y hubo un desvío de Jorge Sánchez que bien pudo sortear Jiménez en el fondo. Sin más, nos fuimos al descanso, lo mejor que le pudo pasar a los de Coapa, pues habría que darle instrucciones al juvenil Ramón Juárez, quien entró en lugar de Cáceres para ocupar su lugar en la central.
De regreso, otra polémica para ponerle emoción y crítica al Clásico. Una falta de Jiménez sobre Ignacio Rivro, quien iba entrando al área buscando la oportunidad para definir. Ninguna fue analizada por el VAR y mucho menos señalada.
Un “soldado” se le volvió a caer al Ave, ahora fue Aguilera, quien sin más sintió un jalón y pidió su cambio. En su lugar entró Santiago Cáceres y el Piojo mantuvo su línea de cinco defensores habilitando al argentino.
Mientras tanto, Robert Dante Siboldi respondió con la salida de Elías Hernández para el ingreso de Yoshiamr Yotún, además también sacó a Santi y le dio minutos a Roberto Alvarado. Ya en la recta final, Misael Domínguez se abrió paso, pero esta vez no hubo hazaña con el poco tiempo que le restaba al juvenil de poder hacer algo significante.
Para no irnos con el mal sabor de boca de la ausencia del ritmo futbolístico, otra jugada polémica. Esta ocasión fueron jaloneos de Luis Fuentes sobre Jonathan Rodríguez, la petición de la pena máxima de los cementeros no fue escuchada y menos ejecutada por el silbante Jorge Antonio Pérez Durán.
Los 90 minutos terminaron, un clásico más que pasa sin nivel en la cancha ni emociones, se unen a este juego el Nacional entre América y Chivas y el Regio entre Tigres y Rayados, solo resta el juego de las Águilas y Pumas.