CIUDAD DE MÉXICO, octubre 7 (Agencias)
El primer gran reto del proceso de Gerardo Martino en la Selección Mexicana lo superó sin ningún problema, jugando bien, dominando la mayor parte del tiempo a Países Bajos, al que venció por 1-0, aunque pudo salirse de la Johan Cruyff Arena con más goles a favor.
La Selección del Tata Martino tiene personalidad, una idea de juego cada vez más sólida y sabe aprovechar los momentos que viven sus jugadores. Una muestra fue la manera como el Tecatito Corona se echó al equipo siendo el alma de la ofensiva azteca.
México hizo los merecimientos para obtener un marcador más abultado en este enfrentamiento ante una Holanda que minimizó al Tri y ese fue su pecado. Raúl Jiménez pudo abrir el marcador en el primer tiempo en dos ocasiones y desaprovechó ambas, pero eso solo sería un calentamiento de lo que sería el segundo tiempo.
RAÚL JIMÉNEZ ENCONTRÓ SU REVANCHA
El delantero de los Wolves se sacudió esa mala suerte en el complemento y fue para darle la victoria al Tricolor con un penal marcado. Jiménez no se intimidó de tener enfrente a un portero como Tim Krul, quien es especialista en los tiros desde el manchón.
El gol le dio mayor autoridad a México que fue superior en gran parte del tiempo, quizás el juego fue injusto para el Tecatito, quien debió coronar su actuación con un gol, pero al final se le negó en dos ocasiones.
Sobre el final del partido la suerte se puso del lado de México, primero con una atajada de Talavera a un remate de De Jong y después el rebote le quedó a Depay que estrelló la pelota en el travesaño, siendo esta la más clara de Holanda en todo el partido.
El Tata entendió que esta clase de juegos contra potencias los tendrá a cuentagotas en su proceso, por eso lo tomó con mucha seriedad, hizo los cambios necesarios y sin inventar para poder aprovechar al máximo el juego y medir la capacidad de su equipo para los grandes momentos como será la Copa del Mundo de Qatar 2022.