Los actores/estrellas hollywoodenses Keanu Reeves y Alex Winter se convirtieron en iconos a finales de los años 80 con la divertida “Las Alucinantes Aventuras de Bill y Ted” (Stephen Herek, 1989), a la que le seguiría un par de años después la menos lúcida, aunque también recomendable “El Alucinante Viaje de Bill y Ted” (Peter Hewitt, 1991). Casi tres décadas después de aquello, ¿estará el mundo listo para “Bill & Ted: Face the Music”?
En la sinopsis en la trama oficial de la historia que continuará narrando las hazañas de Ted (Reeves) y Bill (Winter) viajando en el tiempo. Para continuar con su vida de rock & roll, los amigos, que ahora son dos hombres de mediana edad, se embarcan en una nueva aventura, cuando un visitante del futuro les advierte que solo su canción puede salvar la vida tal como la conocemos.
En el camino les ayudarán sus hijas, varias figuras históricas y algunas leyendas de la música. El regreso de Bill y Ted se da con una película encantadora, una comedia fantástica que sintetiza su carácter de trilogía para encontrar nuevas ideas… y así llega una de las mejores experiencias cinematográficas para este año anómalo: “Bill & Ted Face the Music”.
Esta es una película igualmente anómala, tercera entrega de una saga olvidada sobre la que ni la nostalgia ni el fenómeno de culto parece operar a su favor, un filme sin un público demasiado preciso, pero al cual no le importa demasiado. Una película absolutamente feliz sobre cómo ser felices y mejores, construida sobre múltiples ideas que nunca se amontonan, sino que fluyen todas juntas.
Mi 8.5 de calificación para esta tardía, pero muy buena tercera parte, con Chris Matheson y Ed Solomon, que vuelven a ser los guionistas de esta tercera aventura de la pareja y al cineasta Dean Parisot, responsable de la genial comedia “Héroes Fuera de Orbita” (1999), que ha sido el encargado de dirigir esta nueva película que en español nombraron “Bill y Ted 3: Salvando el Universo”.
Dándole continuidad a lo que fueron las dos primeras películas, Bill y Ted siguen emprendiendo viajes por el tiempo para cumplir un objetivo. Esa fue la idea inicial desde el primer viaje, en el cual buscaban aprobar un examen de historia consultando a diferentes personajes históricos como Sócrates o Napoleón. Esta vez, la fórmula se conserva y la idea es salvar la realidad como la conocemos.
Es en este punto donde encuentro la principal debilidad con respecto a sus antecesoras. Algunas de las claves para que las aventuras de estos adolescentes rockeros resultaran sumamente divertidas, fueron las reacciones de ellos al llegar desde el futuro y los comportamientos de los personajes históricos fuera de su tiempo. “Bill y Ted 3” logra capturar la esencia irreverente de la franquicia, aunque con algunas debilidades en sus puntos clave, pero aun así se da con una película muy encantadora.