En un intento de un aterrizaje forzado, un helicóptero que transportaba un corazón que había sido donado al Hospital Keck, en Los Ángeles, California, se estrelló en el techo del centro médico, por una posible falla en el mecanismo de la aeronave.
La portavoz del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, Margaret Stewart, señaló que las dos personas que iban a bordo señalaron no tener ninguna herida por lo que rechazaron la atención médica.
Los funcionarios del Hospital Keck de la USC dijeron a través de un comunicado que nadie alrededor o dentro del hospital resultó herido y que la atención al paciente no se vio interrumpida.
El helicóptero está estable de costado, en el helipuerto, señaló LAFD en una alerta de noticias a las 3:18 pm del viernes. «No parece haber una fuga de combustible significativa».
Por fortuna el corazón que transportaba el helicóptero para 8 pasajeros, no sufrió daños y pudo ser entregado a los médicos especialistas del Hospital Keck.
Meg Aldrich, portavoz del Hospital Keck de la USC, señaló que solo un par de horas después del accidente, se estaba trasplantando el corazón a un paciente.
A las 5:15 pm, aproximadamente, dos camiones de bomberos con las luces encendidas todavía estaban estacionados afuera del hospital de Keck.
Un hombre de nombre Javier Chamorro, de 59 años, de Huntington Park estaba parado afuera del hospital esperando que su hijo lo recogiera. Dijo que estaba en el segundo piso dentro del edificio a punto de hacer un ejercicio de respiración cuando escuchó un ruido fuerte.
Señaló que pensó que era un terremoto y 15 minutos después, se enteró por un empleado del hospital que el ruido fuerte y el temblor provenía de un helicóptero que se había estrellado en el helipuerto del edificio.
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Con información de: debate.com
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