El grupo de activistas Dobutukikin rescató a 164 perros que vivían acumulados en una casa pequeña, ubicada en Inzumo, al oeste de Japón, lo que la organización consideró uno de los peores casos de acaparamiento y maltrato animal.
Los perros vivían en una residencia de 30 metros cuadrados y en su mayoría estaban desnutridos e infectados con parásitos.
«Todo el piso estaba lleno de perros y todos los espacios que se podían ver estaban cubiertos de heces. Había un olor fuerte, que incluía un olor a orina similar al amoníaco y el olor a heces», dijo Kunihisa Sagami, dirigente del grupo Dobutukikin.
Los funcionarios del centro de salud pública local visitaron la casa por primera vez hace siete años, tras recibir quejas por parte de vecinos por ruido y mal olor, pero el dueño de la casa se negó a permitir que los funcionarios investigaran en ese entonces.
Sin embargo, en julio de este año entraron a la casa por primera vez, después de que en junio se revisó la Ley de Bienestar y Manejo de Animales de Japón.
De acuerdo con el informe de la visita, en la vivienda habitaban tres personas, quienes dijeron que no podían esterilizar a los perros, lo que derivó en la manada.
Los funcionarios de la prefectura de Shimane no han reconocido el caso como abuso o negligencia animal, según Sagami, cuya organización destacó el caso cuando publicaron un video de los perros a fines de octubre.
Sagami dijo que la familia acordó renunciar a la propiedad de los perros, por lo que los activistas buscarán cuidadores para los perros después de que reciban tratamiento médico.
Con información de: vanguardia.mx