Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Cd. Victoria, Tam.-
Por unanimidad de votos, el Pleno del Congreso del Estado aprobó una iniciativa que prohíbe las mutilaciones a los animales con fines estéticos.
De esa manera, fue reformada la fracción V del artículo 20, y se adicionó el numeral 17 a la Ley de Protección a los Animales para Tamaulipas.
Con las nuevas disposiciones quedan prohibidos el corte de cola, el corte de las orejas, la sección de las cuerdas vocales y hasta la extirpación de uñas y dientes.
La acción legislativa aprobada busca erradicar toda práctica que suponga el maltrato y el sufrimiento innecesario de los animales.
“En este sentido se pretende lograr una evolución de conciencia social en la forma de tratar y de convivir con los animales, que genere una comunidad sensible y responsable de su bienestar”, se argumentó.
Originalmente, la iniciativa planteaba que la prohibición se aplicara solo para animales domésticos, pero al final se determinó que se estableciera para los animales en general.
Al debatir la acción legislativa, los legisladores señalaron que la reforma es importante porque deja sin efecto una parte de la ley que permitía las intervenciones quirúrgicas de esa naturaleza, con base en la justificante de que estas se realizaran por razones estrictamente estéticas.
En la fracción V del artículo 20, que describe los actos de crueldad y maltrato animal susceptibles de ser sancionados, se contemplaban tres excepciones para hacer mutilaciones a los animales: por razones de salud, para preservar la vida del animal o por razones estrictamente estéticas.
“Eso es una aberración jurídica”, señalaron los diputados.
Con la iniciativa aprobada este jueves, solo habrá dos excepciones para permitir las mutilaciones: una, cuando se busque el beneficio de un animal determinado; y dos para impedir la reproducción.
La Ley de Protección a los Animales para Tamaulipas prevé que a quienes infrinjan la norma, se le aplicarán sanciones que van desde la amonestación, multa y arresto hasta por 36 horas.
Además, el Código Penal establece una pena de dos meses a dos años de prisión a quien ponga en peligro a un animal de cualquier especie por actos de maltrato, tortura y /o provocándole la muerte.