Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Cd. Victoria, Tam.-
El costo de la inseguridad y la delincuencia para el sector empresarial creció 34 por ciento entre 2017 y 2019; en el caso de Tamaulipas, cada negocio gasta entre los 47 mil y 67 mil pesos anuales por esa causa.
De acuerdo con una investigación de la organización no gubernamental “México Evalúa”, lo anterior ocurre a pesar de que el porcentaje de víctimas de la delincuencia disminuyó, al pasar de 33.7 en 2017 a 30.5 por ciento en 2019.
“Eso significa que la delincuencia es menos frecuente, pero más cara, porque los empresarios deben invertir más en medidas de seguridad y protección”, mencionó la ONG.
Apoyada en datos de la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas (Enve 2020), realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el organismo detalló que el delito que más “pega” a las empresas es la extorsión.
“Si analizamos las empresas por tipo de sector, descubrimos que la extorsión es el delito más frecuente en la industria y los servicios, mientras que el robo o asalto de mercancías, dinero, insumos o bienes afecta más a los comercios. Además, la extorsión también es el delito más común, sin importar el tamaño (micro, pequeña, mediana o grande) de la unidad económica”, indicó.
Entre 2017 y 2019 la tasa de extorsión mostró un incremento de 58 por ciento, al pasar de mil 150 a mil 821 delitos.
“Es importante señalar que en el 92.5 por ciento de los casos estas extorsiones se cometen por vía telefónica. En 2019 hubo un aumento en 5.6 puntos porcentuales en extorsiones telefónicas con respecto a 2017”, precisó.
Sin embargo, la extorsión telefónica se concentra más en ciertos estados que en otros. Por ejemplo, en Yucatán el cien por ciento del total de delitos de extorsión son cometidos por la vía telefónica, seguido de Guanajuato y Sonora con el 98.2 por ciento; Durango con 98.1 por ciento y, finalmente, Querétaro con el 97.2 por ciento.
En Tamaulipas, entre el 65 y 82 por ciento de las extorsiones ocurren vía telefónica.
En 2019 el gasto de los empresarios en medidas preventivas, como cambiar o colocar cerraduras, instalar alarmas o videcámaras, aumentó en un once por ciento con respecto a 2017. Y, por primera vez, la erogación que hicieron los empresarios por gastos en medidas preventivas fue mayor a la pérdida económica a consecuencia del delito en sí”, refirió.
“Si sumamos el gasto en medidas preventivas y las pérdidas económicas a consecuencia de los delitos, tenemos el costo promedio por empresa que, durante 2019, ascendió a 85 mil 329 pesos, mientras que en 2017 fue de 66 mil 31 pesos a nivel nacional”, añadió.
“México Evalúa” lamentó que, a pesar de la situación de inseguridad que enfrenta el sector empresarial, el Gobierno esté disminuyendo el presupuesto para atacar el problema.
“Trágicamente, el Presupuesto de Egresos de la Federación 2021 ya no contempla la asignación de presupuesto para Fortaseg, por lo que la mayoría de los municipios de las zonas urbanas se quedarán sin estos recursos para hacer frente a la delincuencia, incluyendo la que afecta a las empresas. Frente a este panorama, es momento de plantearse de qué manera el sector empresarial puede participar de manera más activa en la construcción de seguridad”, planteó.
Dijo que en 2019 las empresas gastaron 33 veces más en medidas de protección que el presupuesto destinado a los municipios para fortalecer a sus policías y desarrollar programas de prevención, suministrado a través del subsidio para el Fortalecimiento del Desempeño en Materia de Seguridad Pública (Fortaseg).
