Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
Las instancias de Gobierno deberían implementar un programa de concientización para inhibir el éxodo de familias de Centroamérica con el objeto de intentar cruzar de manera ilegal a los Estados Unidos.
Y es que lo que hace años fue concebido como el “sueño americano” ahora se ha convertido una pesadilla, por el problema del coronavirus, el tráfico de personas y la participación de bandas del crimen organizado en la frontera, estableció Jorge Lera Mejía.
El economista y catedrático de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) consideró que hoy en día el tráfico de personas se ha convertido para la delincuencia en una importante fuente de ingresos, sobre todo en los que intentan cruzar hacia el vecino país del norte.
Refirió que en Camargo, Reynosa, Nuevo Laredo y Nuevo León se ha identificado como la tercera zona, donde existe un mayor número de intentos para llegar a los Estados Unidos, en la que se han detectado casas de seguridad y reclutan a migrantes por parte del crimen organizado.
Y aun cuando cada vez resulta más complicado ingresar al vecino país del norte en busca de trabajo, hay una nueva caravana de poco más de seis mil migrantes de Honduras, Salvador y Guatemala, que pretenden llegar a EU.
En el peor de los casos, pudiera ser que algunos de ellos tomaran la ruta más corta, que es por Veracruz, Tamaulipas y el Valle de Texas en los Estados Unidos.
Lera Mejía expuso que las instancias de Gobierno deben explicar a los centroamericanos del riesgo que existe y de la nula posibilidad que tienen de cumplir lo que ahora se considera como la “pesadilla americana”.
Citó que la nueva cepa del coronavirus es más agresiva, impera el tráfico de personas, o bien, pueden tratar de ser reclutados por el crimen organizado, además de los 19 incinerados, que en su mayoría son de origen guatemalteco.
Insistió en que el “sueño americano” no existe y que, por el contrario, cada vez es más riesgoso cruzar a los Estados Unidos.
