Los padres de las dos niñas originarias de Ecuador a las que un par de traficantes de personas lanzaron desde la parte superior del muro fronterizo entre México y Estados Unidos, viven en Nueva York.
A través de un comunicado, la cancillería del país andino consideró el caso de las dos menores como «repudiable” y agregó que, a fin de constatar que las dos niñas se encuentran atendidas y cuidadas.
Las niñas serán pronto asignadas a la División de Menores No Acompañadas/Oficina de Reasentamiento de Refugiados de Estados Unidos para iniciar el proceso de reagrupación familiar, el cual puede tardar unas seis semanas hasta que padres o familiares presenten la documentación requerida.
Un video borroso publicado el miércoles por las autoridades estadounidenses captó, en apenas segundos, como un hombre sentado a horcajadas sobre una barrera de 4 metros de altura cerca de Santa Teresa, Nuevo México, baja a una niña pequeña mientras se sujeta con un brazo.
Luego de que la menor queda colgando, la suelta. La pequeña aterriza de pie, pero después cae boca abajo al suelo. El traficante hace lo mismo con una menor un poco más alta, quien cae primero sobre sus pies y luego sobre el trasero. Posteriormente, el traficante y otro hombre corren hacia el desierto, adentrándose en México.
La sencilla escena captada por una cámara remota es un caso extremo. Pero representa gran parte de lo que está ocurriendo en la frontera entre Estados Unidos y México en medio de un aumento en las llegadas de migrantes, sobre todo de niños.
Muchos niños viajan sin compañía de un adulto. Las autoridades fronterizas detuvieron a más de 9.000 niños sin compañía de sus padres en febrero, la cantidad mensual más alta desde mayo de 2019, cuando se detuvo a 11.000 menores sin compañía en la frontera.
Con información de: lopezdoriga.com
