Rogelio Rodríguez Mendoza.-
En Tamaulipas, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) sigue en caída libre. Ahora fue la diputada Edna Rivera López quien arremetió contra la dirigencia nacional de su partido, a quien acusó abiertamente de vender las candidaturas para las alcaldías y diputaciones.
La voz de la tampiqueña denotaba enojo y resentimiento. Desde la tribuna, en el apartado de asuntos generales de la sesión ordinaria del Pleno Legislativo de este miércoles, le dedicó casi diez minutos de reproches, reclamos y acusaciones al dirigente nacional de Morena, Mario Delgado.
Nunca lo citó por nombre, pero ni falta hizo. El destinatario de su discurso era obvio.
“Espero que les quede muy claro a quienes ocupan cargos en la dirigencia, que con su desmedida ambición están repitiendo vicios de un sistema del que presuntamente estamos en contra. Recordemos que esas añejas prácticas fueron las que dieron origen a nuestro movimiento”, acusó, ante la mirada atenta de todo el Pleno.
Los panistas reflejaban sonrisas de satisfacción. Parecían disfrutar la autodestrucción de su más peligroso competidor para el seis de junio próximo.
“Pareciera que la única forma de hacer política es vendiendo, y no precisamente a los mejores postores, candidaturas para los diversos cargos de elección popular”, siguió Rivera, quien aspiraba a ser la candidata de Morena a la alcaldía de Tampico, que finalmente le fue entregada a Olga Sosa.
“Si queremos resultados diferentes ¿por qué seguimos eligiendo a los mismos?
¿Acaso Morena no tiene quién pueda aportar talento?”, cuestionó.
Denunció que los dirigentes siguen violando los estatutos y reglamentos internos, a través de decisiones unilaterales para imponer como candidatos a individuos que garanticen un vil servilismo, pero que no aportan nada a la vida democrática del país.
Además de ello, siguió, se trata de personajes desprestigiados, porque en el pasado se dedicaron a defraudar a la sociedad.
Y ahí hizo una advertencia: “Pero deben saber que hoy la sociedad no es la misma a la que defraudaron en el pasado. Hoy tenemos ciudadanos críticos que se interesan en participar en la vida democrática del país”.
Pese a todo ello, dijo, no dejará Morena. Confesó que le hicieron ofrecimientos de ir a otro partido.
“Esto motiva a trabajar con más fuerza. Hay mucho por hacer al interior de nuestro partido”, afirmó.
Fue ahí donde dejó caer todo su enojo contra los dirigentes morenistas.
“Hay personajes disfrazados de Pedro, pero son Judas, que a cambio de unas cuantas monedas empeñan el futuro de la nación, entregándolo a mezquinos y reciclados intereses”, acusó.
Dijo que a quienes encabezan Morena les quedó grande el cargo.
Rivera, quien apenas este miércoles se reincorporó a su curul luego de una licencia de varias semanas, denunció que ha sido blanco de ataques mediáticos para desprestigiarla.
“Pero no me intimidan. Quienes me difaman se creen dueños del partido, señal de que tienen miedo de perder sus mezquinos intereses”, acusó.
Aseguró que quienes fueron postulados como candidatos tienen experiencia, pero carecen de valores.
“Por fortuna la ciudadanía ya aprendió a identificarlos, aunque esbocen su mejor sonrisa para la propaganda política”, mencionó.
Hace 15 días, el también diputado local y coordinador de la bancada de Morena, Ulises Martínez Trejo, llamó parásitos y corruptos a Mario Delgado y al diputado federal Erasmo González Robledo, por la forma amañada en que se entregaron las candidaturas.
“¿Dónde quedaron los principios de Morena, de no mentiras, no robarás y no traicionarás? ¿Dónde quedaron los ideales de Morena? Porque se recurrió a toda clase de prácticas, incluso corrupción. La ciudadanía no se merece esto”, preguntó desde el templete legislativo.
En la sesión de este miércoles, se estrenó en la tribuna el panista Alfredo Vanzini Aguiñaga, suplente de Arturo Soto Alemán, quien pidió licencia para dedicarse de lleno a hacer campaña.
Vanzini cuestionó y lamentó la violación a la Constitución Política por parte del Senado de la República, al ampliar dos años el periodo de ejercicio del actual presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Saldívar.
“Esto sería el inicio para que el presidente Andrés Manuel López Obrador tenga más cargos públicos a modo”, advirtió, al recordar que todavía falta el aval de la Cámara de Diputados.
Por su parte, la priista Copitzi Hernández García advirtió que la reforma que obliga a las personas a entregar sus datos biométricos para contratar una línea de telefonía celular, marca el inicio de la vulneración impune de derechos humanos.
“Argumentan que es para combatir la inseguridad, pero ¿el fin justifica los medios? ¿será válido vulnerar la intimidad en aspectos tan personales?” dijo, al tiempo de exhortar a los ciudadanos a defenderse a través de un amparo.
