Nacido en Ciudad Victoria el 21 de marzo de 1985, Francisco Gerardo Rocha Chávez, mejor conocido en el barrio como “Batata” fue un apasionado del futbol, demostrándolo desde muy corta edad en cada uno de las “cascaritas” que se armaban con sus amigos de la colonia.
Sus inicios se dieron a la edad de apenas tres años comenzando a jugar con el equipo de Correcaminos de la Colonia Adelitas, después fue parte de los Fantasmas, así como también de Pumitas Cable, que participaban en la Liga de Futbol Infantil y Juvenil Copa UAT.
Gracias al talento con la pelota tuvo la oportunidad de ser observado por el equipo del Ajax de Holanda, durante dos meses, pero lamentablemente no fue seleccionado por el equipo europeo para continuar en el viejo continente.
En su regreso a México, realizó el viaje a la ciudad de Guadalajara, Jalisco para presentarse a pruebas con el equipo de las Chivas donde estuvo poco más de un año, así como también con el conjunto de los Tigres en Monterrey, Nuevo León, pero debido a que ellos no contaban con casa club, tuvo que regresar a su natal Victoria.
A la edad de 15 años empieza su etapa en Correcaminos con el equipo de Tercera División y apenas un año después debuta con el primer equipo en la extinta Primera División “A” debido a la lesión de los jugadores Jaime Cuesta y Leo Castro, siendo llamado por el técnico José Luis “Chocolate” Hernández.
Al termino el torneo, “Chocolate” Hernández fue cesado del equipo por no lograr la calificación, llegando en su lugar Sergio Orduña quien mandó al “Batata” de regreso a la Tercera División, aunque enseguida recibiría la invitación para jugar en la Segunda División con la Jaiba Brava del Tampico Madero.
Tras su retiro del profesionalismo, “Batata” Rocha se dedicó a jugar en el futbol llanero, siendo uno de los jugadores más ganadores de los últimos años, siendo además reconocido por los rivales. Su experiencia lo llevó a tener su propia escuelita de futbol infantil que participaba en los Torneos de Copa UAT.