Argentina no pudo comenzar con un triunfo en su camino en la Copa América de Brasil: igualó 1-1 ante Chile en el estadio Nilton Santos de Río de Janeiro.
El seleccionado albiceleste marcó distancias en la etapa inicial y sacó ventaja gracias a un tiro libre perfecto de Lionel Messi.
En el complemento se le escurrió la victoria y el causante fue Eduardo Vargas, quien tomó el rebote del penal que Dibu Martínez le tapó a Arturo Vidal.
El elenco argentino se paró con un 4-4-2, con Nico González flotando sobre la izquierda, siguiendo al lateral Mauricio Isla, pero al mismo tiempo siendo agresivo en ataque. Así y todo, los primeros compases fueron de Chile, que juntó sus líneas para no dejar resquicios y presionó en bloque. De esa manera, incomodó a su adversario.
Argentina empezó a hacer pie una vez que superó el primer acoso, desde los pies de Gio Lo Celso. El futbolista más libre de responsabilidades del mediocampo fue incisivo en sus intervenciones para generar peligro.
Con información de: infobae.com