La selección de Italia, flamante campeona de Europa tras imponerse a Inglaterra este domingo en la final de la Eurocopa en Wembley, celebró este lunes su triunfo al recorrer el centro de Roma a bordo de un autobús descubierto ante miles de aficionados que se echaron a la calle para expresar su gratitud.
Tras ser recibida por el presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, y por el primer ministro, Mario Draghi, Italia subió a un autobús descubierto en Palazzo Chigi y recorrió las calles romanas hacia el hotel Parco dei Principi, donde los jugadores dormirán esta noche antes de dejar la concentración.
La selección «azzurra» consiguió el visto bueno de las autoridades competentes tras varias horas de negociaciones para poder celebrar el título junto a sus aficionados, algo que creaba preocupaciones a causa de la pandemia del coronavirus y la gran cantidad de personas que se reuniría para celebrar, muchas de ellas sin mascarillas.
Los más activos en el grupo «azzurro» fueron el capitán Giorgio Chiellini, quien enseñó la copa a sus aficionados, y Leonardo Bonucci, uno de los grandes protagonistas del triunfo ante Inglaterra, al anotar el gol del 1-1 y el penalti en la tanda final.
Italia, entrenada por Roberto Mancini, conquistó este domingo al segunda Eurocopa de su historia, tras la de 1968. Este trofeo se suma a los cuatro Mundiales conquistados en 1934, 1938, 1982 y 2006.