Arnulfo Mata Huerta.-
Margil García Pizaña, jugador de la tercera generación en lo referente al beisbol que desde por allá del año 1945 se practica en esta Capital, añora esos gloriosos tiempos, cuando era un bateador muy consistente y tenía un swing de abanico.
Es decir, de muñecas poderosas y bien coordinadas, esto le permitía conectar por encima de la tercera base.
Margil tuvo muy buenas temporadas defendiendo el uniforme de varios equipos como El Heraldo de Victoria y Choferes.
Para conocer parte de su historial deportivo le solicitamos se nos permitiera formularle un
cuestionario, que aceptó gustoso cuando lo saludamos en el restaurante “La Tía”, y que en compañía de su junior almorzaba sabrosamente.
He aquí las preguntas que le presentamos a este ejemplar jugador, que laboró por varios años en la Comisión Federal de Agua Potable y Alcantarillado de esta ciudad capital.
¿Margil añoras aquellos tiempos cuando regabas hits por todos los ámbitos de los diamantes de esta ciudad?
Claro que sí y no nadamas eso los jonrones dobles y triples que pude dar.
¿Porque te gustó este deporte?
Porque en la primaria fue lo que el maestro nos impartía y de ahí que me gustará este deporte.
¿Que le encuentras de bueno?
Que era un deporte donde uno ponía en prueba su capacidad mental como física.
¿Durante tu trayectoria hiciste amigos?
La mayor parte de mis amigos en Ciudad Victoria los hice en el beisbol, algunos por nombrar al señor Francisco López, que trajo el equipo de gobierno, Juan franco Loya, el profe Benavides, Ramón López (compadre) las mentadas güeras Hinojosa, Pancho Garza, Florencio García El Morejón, Horacio Llamas, Manuel “El Vivo” Sánchez, Ramón Ramos, Guadalupe Chacón (compadre), Abel Quintero, Israel “El Riel”, Pedro “El caballo” Pérez, Francisco Reyna, Gilberto Garza de EL Heraldo, los Metro y usted también güera sin minimizar, muchos más que ya nos dejaron, otros tantos que no terminaría de nombrar de aquí y de los lugares donde jugué.
¿Cual era la posición que más te gustaba jugar?
Pitcher y fielder.
¿Y con cuáles equipos jugaste?
En Padilla con el equipo de ahí mismo Gobierno, Comisión de Luz, la Forestal, la Sahop, Junta Local de Caminos, club Cofrades, Recursos Hidráulicos, El Heraldo, Sombrerería Hinojosa, la Textil.
¿Participaste en eventos de corte estatal y recuerdas en qué municipios y en nacionales si participaste?
Sí participé en varios estatales con Ciudad Victoria. En nacionales no participé, pero también anduve jugando en la liga cañera del Mante.
¿Por qué te retiraste del beisbol?
Porque ya de veterano se me hacían las bases muy largas y por eso empecé a dirigir equipos como Maderería González, la Sahop, la Comisión de Luz, la Junta Local de Caminos y me dediqué a jugar softbol, que era lo que más se parecía al beis y las bases estaban más cerca.
¿Quiénes fueron tus managers?
Mis managers que recuerdo son Juan Olazarán, Juan Franco, Arnulfo Mata, Baldo Hinojosa, Rafael González.
¿Te gustaba tocar la pelota?
Cuando había que hacerlo lo hacía, aunque el manager no me lo mandara, pero era una jugada como quien dice de regla, para avanzar al corredor.
¿Qué barridas te gustaba ejecutar, de cabeza o la natural?
No me gustaba barrerme, pero si era necesario lo hacía.
¿Jugaste en el parque de madera, o sea el que se encontraba donde actualmente está la canchita de futbol?
Sí precisamente ahí metí mi primer jonrón a un pitcher de apellido Tuexi, no recuerdo su nombre ni el equipo, eso fue hace muchos años.
¿Qué puedes decir del beisbol actual?
Que lo han abandonado mucho, ya no es igual antes, estaba mejor organizado, se llevaba récord de bateo de cada jugador un control de cada equipo había más estatales, más cooperación; ahora no hay nada, los dirigentes que están lo manejan como un negocio y para provecho propio, pregunte a la gente de quién quisieran que volviera a dirigir la liga y muchos contestarían si se pudiera revivir a la gente pediríamos al profe Benavides, que fue gran precursor de este deporte.
¿Margil jugaste softbol y quiénes fueron tus equipos?
La Junta Local de Caminos, Cofrades, El Diario, la CFE, y fui seleccionado estatal y algunos otros que no recuerdo.
Por último, ¿Margil cuantos años laboraste en la Comapa?.
Trabaje primero de carpintero en Victoria y anduve tapando baches en la Junta Local, después pasé a la Textil diez años, enseguida pasé a la Junta de Aguas de Recursos Hidráulicos y luego llegué a la Compa, donde duré 30 años.
¿Qué les puedes decir a los nuevos valores del beisbol?
Que le echen ganas a lo que hacen si en verdad les gusta, que ya no hagan niñerías y se dediquen con gusto a este deporte que practican, que lo apoyen para que vuelva a ser lo que fue antes.
¿Y cómo te la pasas actualmente?
Actualmente mis achaques ya no me permiten caminar bien, por lo cual casi no salgo, pero veo los juegos de beisbol por la televisión de las grandes ligas y si se puede las de México, que es lo que me mantiene, todos los días salgo a almorzar con mi hijo Margil a Las Viandas y por la tarde Jorge, mi hijo mayor, va los domingos a visitarme y así es mi vida, pero como dice el dicho, donde hubo lumbre cenizas quedan y la pasión por el beisbol en mí siempre estará presente.
Gracias Margil por tu tiempo prestado a este reportero.