Alguna vez seguramente has oído hablar acerca del Pink Tax, mejor conocido en español como Impuesto Rosa, sobre todo en las conversaciones entre mujeres.
Aquí te vamos a decir en qué consiste y por qué solamente las mujeres lo pagan e incluso pagan más que los hombres por el mismo producto.
Este impuesto se refiere al costo tan elevado que tienen algunos artículos de cuidado personal o dirigidos exclusivamente para el sector femenino, lo que no sucede con los artículos para los caballeros.
Es decir, este ‘impuesto’ se aplica en los productos que se distinguen por el color de la etiqueta o por el personaje que aparece en la marca, por lo que los productos que están dirigidos a las mujeres suelen ser hasta 17% más caros que los artículos para hombre.
Sin embargo, se puede decir que no es singularmente un impuesto, sino que se puede definir como un sobreprecio aplicado a estos productos femeninos.
A nivel mundial las mujeres suelen ser quienes realicen las compras, por lo que este sector es el objetivo principal para las estrategias de consumo, por lo que es común encontrar este ‘impuesto’ en artículos como ropa, cuidado personal e higiene, ya que las marcas invierten más dinero en la presentación, diseño y publicidad de sus productos.
Una opción para evitar este ‘gasto extra’ es que podemos comprar artículos dirigidos a los hombres como por ejemplo un rastrillo azul en lugar de uno rosa, que su función es exactamente la misma, así como otras muchas alternativas que funcionan igual.
Así que ponlo en práctica y ahórrate unos pesos.