Diego López Bernal
Las esperanzas para que las presas de Tamaulipas lograran una recuperación significativa comenzaron a desvanecerse este miércoles; el huracán “Grace” dejó de enfilarse a nuestra entidad y ahora se dirige a Veracruz.
En su reporte de la una de la tarde de hoy, el Sistema Meteorológico Nacional (SMN) informó que “Grace” tenía un desplazamiento hacia el oeste-noroeste a 24 kilómetros por hora, por lo que tocaría tierra mañana en la Península de Yucatán
Sin embargo, se pronostica que por la tarde de este jueves ingresará al Golfo de México, lo que podría variar su trayectoria, la cual hasta el momento apunta hacia el norte de Veracruz, lejos del puerto de Tampico, la ubicación tamaulipeca más cercana.
La necesidad de copiosas lluvias para nuestra entidad nace del pobre nivel de almacenamiento de las presas ubicadas en ella; por ejemplo, al viernes pasado Vicente Guerrero estaba al 37.5 por ciento de su capacidad.
Para darnos idea del impacto de las precipitaciones pluviales por un ciclón podemos ver el ejemplo de lo sucedido el 19 de septiembre del año pasado, cuando el huracán categoría uno “Genevieve” dejó lluvias en Baja California Sur de 280 milímetros en solo 24 horas, a pesar de no haber tocado tierra.
En comparación, las lluvias durante julio en Tamaulipas dejaron un promedio mensual de 168.8 mm, lo que fue suficiente para salir de la sequía en gran parte de la Cuenca Golfo Norte, pero no para rellenar las presas.
Otro punto de referencia sobre las expectativas de lluvia por un huracán lo muestra el pronóstico de hoy por la tarde del SMN, organismo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
En su reporte de la 13:00 horas, el boletín alertaba sobre lluvias puntuales torrenciales (de 150.1 a 250 mm) en Quintana Roo, las que iniciarían hoy mismo por la tarde-noche, mientras que para Yucatán se esperaban intensas (de 75.1 a 150 mm).