José del Carmen Perales Rodríguez.-
Cd. Victoria, Tam.-
Al obligar Estados Unidos a México a continuar como «patio de espera» para los migrantes de otras nacionalidades que solicitan asilo en aquel país, se está contribuyendo a incrementar los riesgos a la seguridad, paz social, salud y entorno económico de la zona fronteriza.
Christiaan Edoardo Pérez Cosio, asesor legal de la Federación Estatal de Cámaras de Comercio (Fecanaco) de Tamaulipas, advirtió lo anterior y urgió al Gobierno federal para que busque y acuerde otra opción que no impacte a la población de esa región.
«Esta medida, que obliga a los solicitantes de asilo en EU a esperar en México mientras se procesa su petición, tendrá una implicación directa en los municipios fronterizos de Tamaulipas, por lo que el Gobierno mexicano debe ser enérgico y buscar otras medidas antes de aceptar volver a ser patio de espera para deportados», señaló.
El también secretario de técnico del organismo, sostuvo que volver aplicar el Quédate en México, reventará el entorno social de las ciudades fronterizas por las condiciones en que se encuentran los refugios.
«Estas ciudades ya están rebasadas de deportados que están desatendidos, no tienen vivienda, servicios de salud, empleo y se han convertido en ciudadanos de nadie, generando problemas de seguridad y sanitarios», advirtió.
Pérez Cosio aseguró que en la práctica la política migratoria de México sólo está provocando que la frontera se inunde, desproporcionadamente, de población flotante de origen centro americano y de otras partes del mundo.
«Inclusive ya hay comunidades de habitantes haitianos, africanos, centroamericanos que se han establecido en la frontera al ser rechazados por EU», refirió.
Finalmente el empresario dijo que «se debe ser muy cuidadosos de permitir una nueva oleada de personas asentadas en áreas aledañas a los puentes internacionales, en campos que asemejan refugiados esperando un proceso migratorio que podría tardar años».
